Capitulo 5

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-Sarada, comportate -la imponente voz de Sasuke se hacía presente en toda la habitación- Está decidido, no hay nada que hacer, punto.

-Es el colmo, simplemente no puedo creerlo padre, de todos ¿tenía que ser precisamente el? -exclamo con clara molestia- ¡No pienso ceder ante está orden, punto.!

-Sarada...esto no está en nuestras manos, escúchame hija...es por...

-¿Por el que mamá? ¿Por el bien de la familia? -menciono en tono burlón, tocando el puente de su nariz a manera de molestía- ¡literalmente nos estamos pudriendo en dinero y riqueza!

-No es eso hija entiende...es un compromiso que los uzumaki y nuestra familia habían resguardado para que nuestras familias se hicieran una y mantener la paz y el lazo intacto como hasta ahora.-trataba de que su voz sonara lo más natural posible, pero era difícil lograrlo con el comportamiento de su hija.

-¿Estás bromeando?...-levanto la mirada en busca de su madre hasta dar con ella en el amplio comedor donde se encontraban- es ridículo, hay más de una forma de mantener "un lazo intacto" -hizo comillas con sus dedos tratando de recuperar la calma antes de continuar- por este estúpido compromiso estaré atada a alguien egocéntrico y desquiciante-respiro profundo-ademas no es solo eso tengo dieciséis años madre, demaciado joven para contraer matrimonio.... simplemente no es justo.

¿No es justo?
¿Cuando lo había sido para ella?
Era verdad nunca, y ahora se encontraba reprochando lo que sabía que no podía cambiar.

-Esta decidido Sarada -Sasuke interrumpió el tenso ambiente que se había formado entre su esposa e hija- termina tu cena y sube a tu habitación, iremos a visitar a los uzumaki para completar los arreglos de tu compromiso.

-.....de acuerdo padre.

No tenía caso continuar discutiendo por algo que no tendría arreglo en lo más minimo, lo único que le quedaba era sentarse a resignarse a lo inevitable.
Termino lo último de su cena para después dar las gracias seguida de una reverencia en despedida a sus padres, subió cuidadosamente los escalones uno a uno hasta llegar a su habitación, la última en el segundo piso de la residencia.

-Buenas noches señorita Sarada me informan que tiene una llamada urgente de la señorita yodo. -interrumpió su andar una empleada que pasaba cerca de ella- es todo, buena tarde.

-muchas gracias luci -despidio a la joven con una leve sonrisa.

Retomó su camino a paso rápido si era yodo llamando era algo realmente importante, regularmente ella venia o viceversa.
Abrió la puerta de golpe adentrándose en la habitación buscando torpemente su teléfono que sonaba en alguna parte. Finalmente lo encontro bajo sus sábanas, sin más respondió al llamado.

-¿Sarada?-su voz sonaba ronca-¿Sarada estás ahí? -volvio a llamar en busca de una respuesta, se estaba desesperando.

-¿Qué pasa yodo? ¿Te sientes mal? ¿Ese idiota te hizo algo? ¿Te....

-Gracias a dios aún vives -se pudo escuchar como soltaba una bocanada de aire aliviada- cálmate no es nada grave o bueno no tanto...lo que pasa es que mi compromiso se llevará a cabo más tarde que el tuyo ...

-¿Eh? eso era lo grave? -no entendía a que quería llegar su amiga, esto podría haberlo dicho después cuando se vieran- ¿Que paso con eso?

-te casarás en cuestión de meses, estamos en primer año y faltan más de siete meses si todo llega a salir como tienen planeado es probable que estés casada para fines de noviembre, además acabo de escuchar a mis padres hablar sobre "mudarse" con sus respectivos prometidos que era tradición o algo asi y tú seras la primera en vivir con ya sabe...

La chica de ojos negrosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora