Eres Tú | Itachi y Tu

1: Niñera

Sus manos estaban atadas sobre su cabeza, su cuerpo estaba extasiado pidiendo cada vez más de ese adictivo toqueteo que era proporcionado por el jóven de cabellos negros y ojos del mismo color.

Sentía como cada nervio reaccionaba de manera inmediata a cada estímulo recibido.

T/n: I-Itachi.

Itachi: Pídeme más y te daré más.

Su voz era grave y seductora, solo con escucharla tan cerca de su oído la hacía erizar, y es que no era para menos, tener al joven Uchiha sobre su cuerpo, como dueño de éste sin poder mover sus manos hacia más excitante la situación.

El jóven de cabellos negros pasaba sus manos entre sus piernas dando pequeños apretones que generaban gemidos de su acompañante.

T/n: Jum… Ita-chi —sonríe.

Sus labios estaban por juntarse con los ajenos hasta que escuchó a lo lejos tres fuertes golpes a la puerta, golpes que la sacaron de su tan dulce y emocionante ensoñación. Maldición, se había quedado dormida.

—¡______, quiero comer!

T/n: Maldita sea…

—¡Te escuché!

T/n: Ya voy, Sasuke, ya voy.

Se levantó de la cama de manera rápida y buscó pantalones, al menos algo que le cubriera la parte inferior del cuerpo. Dormir en la cama del Uchiha había empezado a generarle esa clase de sueños en dónde recordaba las veces que había estado con él compartiendo esa misma cama.

Sasuke: ¿Soñaste con mi hermano?

A veces Sasuke lograba leerla sin ella decir una sola palabra, eso daba miedo.

T/n: No.

Sasuke: No me mientas, ______.

T/n: Eres cruel, ¿te lo han dicho?

Sasuke: Así me quieres.

T/n: Sí, así te quiero, pero tienes 13 años y eso no te da en absoluto el derecho de meterte en los asuntos de los demás, cuando tengas mi edad lo entenderás.

Sasuke: ¿Tengo que esperar a tener 20 años para entender?

T/n: Así es —sonríe. —Por mientras, sigues siendo un niño que no entiende muy bien de las cosas de la vida.

Sasuke: Eres una mujer muy cruel.

T/n: Así me adoras.

Sasuke: No te creas tanto.

T/n: Entre Itachi, Shisui y yo, muestras favoritismo por tu servidora —sonríe. —¿Así quieres que no me crea tanto?

Sasuke: Eres una arrogante.

T/n: Tal vez por tanto tiempo conviviendo con Uchiha pequeño se me han contagiado ciertas mañas, ¿ves lo feo que es?

Sasuke: Tsk.

¿Cómo llegaron a esa situación? El comienzo se remonta hace tres semanas.

Una linda joven de cabello castaño y ojos grises caminaba de regreso a su casa tras una larga jornada en su universidad. Sería el último día que iría, al menos hasta dentro de 6 semanas que tendría una exposición de fotografía. Las vacaciones de mitad de año habían llegado y estaba entusiasmada de poder descansar de los mocosos de los que era tutora.

Llegó a su casa encontrándose con su dulce padre y su hermano mayor.

T/n: Papá, hermano, ¡ya llegué!