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Bueno, hola, soy Diego, tengo 24 años, soy de Barcelona, España, ahora estoy estudiando en Nueva York, hace dos años ya que me cogieron en la universidad de aquí y he tenido que dejarlo todo allí; mi família, mis amigos y mis mascotas. Los echaré de menos, por eso tengo dos semanas de vacaciones en la universidad y voy a ir a verlos a todos.

Estoy saliendo de mi última clase, voy a mi taquilla a recogerlo todo para no dejarme nada. Lo meto en la mochila, que por cierto pesa más que la profesora de inglés, y me voy dirección a mi coche, no sin antes ir a la máquina expendedora y pillar las barritas de chocolate que son lo único bueno en esta universidad, enserio, es un vicio. En el camino me encuentro con varios compañeros de clase y amigos que he hecho aquí, de los cuales solo yo y tres más somos de España.

Voy al aparcamiento, abro la puerta del conductor, tiro la mochila en el copiloto y arranco el coche, y cuando voy a tirar marcha atrás me llaman, y veo que es Sergio, oh joder me olvidé de él. ¿Recordáis que solo vinimos 4 españoles?
Bien, pues Sergio es uno de ellos, y es mi mejor amigo aquí, en Estados Unidos, nos llevamos muy bien desde que nos conocimos y es mi compañero de piso, decidimos vivir juntos en un piso cerca de donde estudiamos.

Hubiéramos compartido habitación en la universidad, pero nos echaron por meter pegamento en todas las puertas, aquel día todos durmieron en el pasillo menos nosotros, fue el mejor día de mi vida, aunque a la mañana siguiente me llamó mi padre diciendo que había tenido que pagar nuestro destrozo y que me había quitado la línea del teléfono durante un mes, pero valió la pena, y tanto que lo hizo.
Cojo el telefono.

-Menos mal que llamas ahora, ya me iba.

-Tío, esta mañana te dije que íbamos juntos, casi me dejas aquí.

-Ya lo sé, casi, pero no lo he hecho, así que, dónde estás?

-Ya salgo estoy en recepción para que me impriman un trabajo de matemáticas.

-Muy bien, y porque llamas entonces?

-Porque sabía que no te acordarías.

-Bien visto de tu parte, bueno estoy donde siempre, hasta ahora.

-Dónde es donde siem...

Antes de que pudiera hacer si quiera la pregunta yo ya habia colgado, no me apetecía seguir hablando, y él es inteligente, ya me encontrará.

Miro en el bolsillo pequeño de mi mochila y encuentro mis auriculares, los enchufo al móvil y voy a spotify, pongo mi playlist de música en inglés, y me los pongo, se está escuchando 'what makes you beautiful' de one direction. Aún extraño cuando estaba toda la banda unida. Sí, la canción es vieja, pero me encanta.

Cuando era más joven (hablamos de mis 17) mi hermana mayor me obligó a escuchar todas las canciones de esa banda, una a una sin excepción, y es la mejor decisión de mi puñetera vida. Ahora, a sus 31 años, escuha puro reggetón con sus amigas, pero su mayor secreto lo guardo yo, y es que sigue teniendo el mp3 donde estaban descargadas todas esas canciones, y lo esconde en un cajón de su mesita de noche, y muchas noches la he visto con el mp3 y los auriculares puestos.

Cierro los ojos para disfrutar de la canción y cuando le quedan segundos para que termine alguien tira del cable de mis auriculares y me los quita. Odio a este chico. Es Sergio, que acaba de llegar al coche, y como no le estaba haciendo ni caso, pues me los ha quitado para que le atienda.

-Te estoy llamando desde fuera imbécil.

-Lo siento señor borde, estaba escuchando música para pasar el rato ya que mi amigo tarda más que la liebre en llegar a la meta.

La miserable historia de un enamoradoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora