Capítulo cinco

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~26 de junio, 2020 |París, Francia ~

Miraba inquieta la pantalla oscura de su móvil. De repente la idea de enviarle el mensaje le había parecido la peor de todas y se maldecía por eso.

Tonta, ¿te gusta ser tonta?

Pero la vibración del móvil pareció responderle. Lo desbloqueó rápidamente y vio su respuesta.

@ovejatrasquilada
Me hago unas palomitas y estoy 👉🏻👈🏻
¿Ya es de noche en tu hábitat del planeta?

@jigglycat
¿No es tarde para unas palomitas?
Aquí sí, son casi las diez...

@ovejatrasquilada
¡Ay! Perdona... pero me he puesto a editar un par de fotos y se me ha ido la noción del tiempo🤦🏻‍♀️

@jigglycat
Haces fotografías muy bonitas 😸

@ovejatrasquilada
¿Me has stalkeado? 🙀

@jigglycat

Por supuesto, a ver si te crees que yo comento series con cualquiera 🤫

@ovejatrasquilada
Eso me ha llegado al corazón, Jiggly 🧡


Sus mejillas parecían bombillas en aquella habitación de paredes blancas llenas de gotelé. No entendía por qué reaccionaba de esa manera ante cualquier interacción con esa cuenta.

No sabes nada de esa persona, cálmate.

Lo intento.

No te sale y parece que tonteas.

No lo hago.

Sí lo haces y no sabemos quién está detrás, frena.

Freno, pero voy a responderle.

Sacudió la cabeza, queriendo dejar sus pensamientos atrás y volvió a desbloquear el móvil y responderle.

@jigglycat
Uy, que la ovejita nos ha salido sensible

@

ovejatrasquilada
A veces demasiado, pero no quiero ponerme intensa 🤪
Cuéntame mientras explotan las palomitas... ¿De qué parte del mundo me escribes?

@jigglycat

Francia 🇫🇷 ¿usted?

@ovejatrasquilada
Que puñal, me has hecho sentir super mayor 😢
¿No hablas muy bien español?
Inglaterra 🇬🇧

@jigglycat
¿No eres mayor?
Es que soy de Españita, solo llevo aquí unos meses.


Alba Reche se sentía orgullosa de sí misma por ir consiguiendo información, rellenando los huecos de las dudas que le habían aparecido aquella tarde, mientras le daba vueltas a aquel plan improvisado.

Esperó pacientemente una respuesta que tardó más de lo que le habría gustado incluso llegar a admitir y dio un par de vueltas en la cama, jugando con el cordón de la cintura del pantalón corto azul de nubecitas que usaba de pijama.

Aviones de papelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora