Después de tanto esperar, recibimos la llamada de mi madre. Eran como las 9 de la noche tal vez.
- Hija, soy tu madre ¿como han estado?
- ¡Mamá! Muy bien, y ¿cómo está tía?
- Muy bien, los doctores están haciendo lo posible. Dile a Esteban que esté tranquilo.
- Si mamá, tranquila. El está conmigo y es lo que el quiere. De todas maneras siempre soy la única que está con el. Sólo estábamos esperando tu llamada para poder dormir tranquilos.
- Ok hija. Te dejo, chao. Mañana hablamos.
- Ok mamá. Bye -colgué el teléfono. Le informaré a Esteban.
- ¡Estebaaan!
- ¿Que pasó? ¿Era tu mamá?
- Sip -y me senté a la par de el, en la cama.
- Bueno, ¿que esperas? ¿Como esta mi mamá?
- Dice mi mamá, que tú mamá está bien. Que los doctores están haciendo lo posible. Mañana me vuelve a llamar -le dije.
- Ah bueno, gracias a Dios. Bueno, ya que llamaron, quiero dormir un poco más. Ven acompáñame.
- Okay, yo también tengo sueño.
Nos dormimos hasta el día siguiente.
Amaneció, Gerardo y Tamara hicieron el desayuno. Si, Tamara durmió en casa, al igual que mis otros primos. Luego llega Tía Kelly para cuidarnos.
- ¿Cómo durmieron niños? -nos preguntó Tamara.
- Bien -respondimos los dos mientras tomábamos un poco de jugo de naranja.
- Bueno, terminen de desayunar y se duchan, y luego se alistan por favor.
- ¿Para que? Sólo queremos estar en casa, no me siento bien para salir -dijo Esteban.
- Iremos al parque Esteban. Necesitamos despejarnos -le dijo su hermana, Tamara.
- Ay ok ok.
Terminamos de desayunar, nos duchamos y alistamos, como Tamara pidió.
Bajamos a la sala, ahí estaba Tía Kelly y mis primos, Gerardo también por supuesto.*de camino al parque*
ESTÁS LEYENDO
Loca historia
Ficção AdolescenteRiley Adams, una chica loca, feliz, divertida, bipolar, bueno no... o si? A través de la historia, se darán cuenta de su vida. De sus situaciones amorosas y eso. Mientras pasan los días, le pasarán cosas muy extrañas, cosas que nadie se imaginaría...