𝙞𝙙𝙤𝙡 | 𝙟𝙟𝙠

𝙗𝙩𝙨 𝙤𝙣 𝙩𝙤𝙪𝙧

Hoy hacía cuatro días que estaba en Nueva York, había decidido venir de vacaciones unos días y, de paso, visitar a unos amigos de mis padres, pues residían aquí.

Cuando llegué Ashton me recogió en el aeropuerto.

–¡Que mayor estás!– Ashton era muy amigo de mi padre y su esposa de mi madre. Se conocieron en Hawái, cuando mis padres fueron de luna de miel.

–¿Cómo están los peques?– Ashton y Eunsang tenían dos mellizos muy monos, Luke y Jane.

–¡Desean verte!– Durante el trayecto escuchamos algo de música y comentamos el partido de los yankees del día anterior.

Al llegar abracé a los pequeños y a Eunsang y me invitaron a cenar. Se ofrecieron a dejarme dormir en su casa, pero yo había reservado un hotel para una semana.

–¿Cuántos días vas a quedarte?– Eunsang y yo hablábamos mientras la ayudaba a lavar los platos.

–En principio una semana.

Eunsang me miró, dejó lo que estaba haciendo y se acercó a mí.

–¿Va todo bien, verdad?

Yo asentí, había cogido estos días libres para despejarme un poco, pues llevaba mucho tiempo sin tomarme un descanso.

Le conté que había organizado este viaje para darme el capricho de visitar Nueva York y, de paso, encontrar algo de inspiración para nuevas canciones.

Cuando dejé la acojedora casa, pedí un taxi para llegar al hotel. Una vez allí hice el check-in y subí a mi habitación.

Al entrar encendí las luces e, inmediatamente, me despojé de la ropa que llevaba, para darme una larga ducha. Había intentado no dormirme en casa de Eunsang, así mi jet-lag no sería tan grande.

Al salir de la ducha me estiré en la cama. Mi habitación tenía unas bonitas vistas a la iluminada ciudad.

Cuando mis ojos estuvieron a punto de cerrarse mi teléfono empezó a sonar. Lo agarré de la mesita y me lo acerqué al oído.

–¿Huh?

–Pensaba que no estarías despierta– Inmediatamente una sonrisa se puso en mi rostro.

–Hace nada que he llegado al hotel– Me senté en la cama, apoyando mi espalda en el cabecero de la cama.

–¿Ha ido bien la cena?– La voz de Jungkook era duce, casi podía notar su sonrisa al otro lado de la línea.

Le conté lo que habíamos cenado, mi conversación con Eunsang, le hablé sobre el partido de los Yankees y la gran obsesión de Ashton con ese equipo.

–Me alegro de que todo haya ido bien.

Su voz me calmaba de tal manera que mis párpados empezaron a cerrarse lentamente.

–___-ah.

Abrí los ojos de golpe.

–¿Uhm?

–Nos vemos a finales de semana.

Cuando Jungkook pronunció aquellas palabras recordé su concierto. Ellos estaban en América también, debido a su tour mundial.

–Si, nos vemos a finales de semana.

Sonreí y supe que él también lo estaba haciendo. Nos despedimos, deseándonos las buenas noches.

Los días siguientes visié Nueva York, hacía casi dos años que no visitaba la gran ciudad. Fui a muchas cafeterías en las que llené hojas y hojas de letras que, semanas después, se convertirían en canciones.