La madrugada no ha arribado aún y aún así me veo aquí, escribiendo, no logro comprender si es un doloroso y real sentimiento el que me llevo aquí, o simplemente otro malvado juego de mi pensamiento, quizá lo que siento es solo una ilusión sin fundamento creada solo para hacerme dudar, para hacerme sentir mal, para generarme esa incomodidad de que algo cambió, ya sea en mi o en esa otra persona, ese sentimiento se siente real, y al mismo tiempo, puedo negar su certeza, nada ha cambiado, al menos eso me gusta pensar, quizá su estado de ánimo o el mío genera situaciones que solo puedo categorizar como diferentes, me consuela pensar que solo es un cambio momentáneo y necesario, mis pensamientos se calman y cesan sus macabros juegos cuando logro estabilizar mi confianza por sobre todas mis inseguridades, pero aún así, ese sentimiento no se va, como si fuese algo inmutable de mi estado de ánimo, esencialmente me siento bien, no me duele el pecho, ese nudo constante en mi garganta no me ahoga como lo hacía antes, y ese dolor de cabeza suave pero constante ya no se presenta, pero aún así, no es dolor ni tristeza, es un mal presagio que constantemente me susurra al oído que algo anda mal, algo anda mal, yo lo sé y puedo asimilarlo, después de todo, no puedo controlar todo en este mundo, mas no me atormentan esos problemas, me atormenta la posibilidad de que haya un problema que se me escapa, que esa persona haya cambiado su opinión de mi, ¿es su estado de ánimo el que causa esto? O es una reacción cuyo inicio se basa en la falta de cariño o interés, y si esa falta es real, ¿es mía?, preguntarle sería la forma más eficiente y menos confusa de terminar con este sentimiento, ¿Me amas como antes?, ¿me quieres como antes?, ¿confías en mi?, quizá las repuestas a esas preguntas si bien puede o no ser las que mi corazón desea, calmaran mi mente, o eso espero, mas no es el momento de plantear esas incógnitas, por ahora simplemente dejaré rienda suelta a mis pensamientos, para que como una bola de demolición destruya toda confianza que ocupe lugar en mi cabeza, seguiré pensando que no soy interesante, como un mago cuyos trucos ya han sido revelados, constantemente, una y otra vez, repitiendo el mismo proceso para intentar entretener y mantener a la gente con el, hasta que finalmente, cuando el mismo truco ha sido usado infinidad de veces, deja de ser interesante, y cualquier deseo de un espectador de estar ahí, es borrado, haciendo que lentamente se alejen.
Quizás me he enrollado mucho, simplemente tengo miedo de ya no ser interesante para ella, tengo miedo de que ya no sonría conmigo, de que ya no tenga las ganas suficientes como para abrir su teléfono y contestarme, solo para ver nuevamente algo que ya vio, ¿será interesante o entretenido hablar conmigo?, y si lo es ¿ querrá quedarse aún cuando ya no lo sea?, pero yo confío, quizá sea por mi amor hacia esa persona, o es por la insondable tranquilidad con la que llena mi alma al dejarme pensar en ella como alguien a quien puedo contarle lo que sea, así que, confiaré, la amo después de todo, supongo que realmente me gusta pensar en cosas complicadas.
Pero bueno, tengo que irme, mi cabeza ya comienza a doler.
Gracias por leer
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Sentimientos
Non-FictionNo es nada muy elaborado, solo deje que mis dedos fluyan y expresen lo que mi boca no puede en este momento. Disculpas de antemano a cualquiera que lo lea.