LA NERD MILITAR

Cap.59 (Alessia y Jeff)

Llegue al centro comercial, baje de mi auto y me dirigí a unas de mis tiendas, si mal no recuerdo tenía un departamento de bebes, cuando entré salude a los empleados que me encontraba al igual que ellos a mí.

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Ya llevo mucho tiempo, me encuentro saliendo de mi tienda llena de bolsas, todo estaba precioso.

A mi lado, esta Carlos, un chico que trabaja en mi tienda y me ayuda con las bolsas, pero el pobre no pudo con todas.

- ¿Sam? –preguntó una voz a mi espalda por lo que giré.

-Hola, señora Alessia –le dije y la abrace como pude, yo termine con Jack no con su familia, lo mismo pasa con Hailey, no me alejare de Harry ni de Hilary por ella –cuanto tiempo –le dije sonriendo y fui a saludar a Jeff.

-Sí, tienes mucho sin aparecerte por la casa –comento Jeff, al parecer no saben que terminé con Jack –hoy la mamá de Alessia viene ¿Por qué no vienes a cenar? –preguntó animado y yo hice una mueca.

-Lo siento, no creo que sea correcto, sería sumamente incomodo –susurre lo último para mí, pero creo que lo escucharon.

- ¿De qué hablas? Eres la novia de nuestro hijo, ya eres parte de la familia –Alessia sonrió y mis ojos se aguaron --¿Qué pasa? –preguntó limpiándome una lagrima que no sabía que tenía.

-Nosotros terminamos hace un mes, creo –murmuré confundida –no sé qué tiempo paso exactamente, estuve trabajando –le dije alejándome y sonriendo triste –lo siento ya me tengo que ir, Lily me busca –le dije cuando la vi a lo lejos y me dirigí a ella a paso apresurado sin dejarla hablar, cuando llegue solté las bolsas y Demon me salto encima lamiéndome la cara –te extrañe mucho demon –le dije abrazándolo, me lo quité de encima y recogí las bolsas –gracias por traerlo Lily –le dije y ella asintió con una sonrisa.

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Llegué a mi casa y mandé a mis hermanos a sacar todas las bolsas del auto y subirlas a mi habitación, mientras yo pensaba en qué diablos cocinare, Sarah quiere comida asiática, por lo que cocinare eso para todos, no andaré haciendo algo diferente para cada persona, si alguien no quiere comer, entonces que no coma.

Después de un buen rato cocinando, me decidí por hacer Dumpling, Sarah los ama, serví y comencé a poner la mesa.

Luego de poner la mesa me dirigí a la habitación de Sarah, cuando abrí la puerta me encontré con mi madre y ella recordando travesuras de pequeñas mientras reían, en un momento ella se paró para tomar a Sol y le dio un beso, me dio tanta ternura que les tomé una foto sin que se diera cuenta, la pequeña tenía un gorro igual que ella.

-Tía Sarah, ya está la comida, espero que aún te sigan gustando los Dumpling –dije y juró que vi como sus ojos brillaban –creo que eso es un sí –dije divertida, tomando a la pequeña Sol mientras mi madre la ayudaba a caminar al comedor –PITUFOS, LA COMIDA YA ESTA –le grite al pitufo menor (Sebas), mayor (Maicol) y anciano (papá).

Estábamos comiendo en silenció, pero un silenció tranquilo, al parecer todos estaban devorando sus platos, yo estaría haciendo lo mismo si no tuviera miedo de quemar a Sol.

-Tía estaba pensando en que deberías ir a chequearte con médicos del extranjero –comente cuando terminamos de comer, haciendo que se pusiera pálida, por lo que supuse que no le había dicho aún nada a mamá –digo, hace poco saliste de eso de la adicción y quiero asegurarme de que no tengas ningún problema por eso y creo que no te vendrían mal, unas vacaciones te servirán para relajarte, mamá podría acompañarte –agregue rápidamente a lo que ella soltó el aire detenido.