El viaje de nuestras vidas

Cap. 2: "Luces y sombras"

Apenas llegó a Shangai, Wang Yibo se encerró en su habitación del hotel. Los grandes ventanales tenían una de las mejores vistas de la ciudad, siempre y cuando el smug lo permitía, se paró en el balcón y suspiró. Su vida se veía como la vista de esos ventanales, a veces su futuro era claro y otras no tanto. Durante años no se había sentido bien con lo que estaba haciendo y sentía que nada era suficiente. Tal vez por eso sentía que nada lo satisfacía, pero sabía que no podía darse por vencido. Después de todo, esta vida era la que siempre había querido, desde que era un niño solo soñaba con ser cantante, y ser famoso. Nunca pensó que su sueño lo alejaría de todo y que a pesar de estar rodeado de gente todo el tiempo, estaba solo, se sentía solo.

Los medios se llenaban de rumores sobre él y su supuesta vida amorosa. De sus salidas con modelos o cantantes, de sus noches "locas" y viajes secretos; cuando en realidad siempre estaba solo y nunca podía tener nada real, sobre todo porque no le gustaban las mujeres, eso lo tenía bien claro y desde el momento en que lo supo, le dijo a Qirem,  quien era el encargado de iniciar los rumores sobre sus citas, para protegerlo, o mejor dicho para proteger su inversión. Ese niño era oro y si tenía que tapar sus fallas, lo haría. Yibo soñaba con encontrar algún día a esa persona que significara todo para él. Tenía la típica pinta de "niño malo" o "fuck boy" pero por dentro era un romántico empedernido. No quería renegar de su país, pero a veces lamentaba vivir en un lugar tan conservador que no le permitía vivir su sexualidad al máximo y tener una vida normal con la persona que eligiera. Encendió un cigarrillo y se sentó a esperar la puesta del sol, solo pensando, cerró los ojos y soñó despierto con una familia, una familia como la suya con su hermana y sus padres, a quienes extrañaba mucho y veía poco, por culpa de su tan apretada agenda. Tomando otra bocanada de su cigarrillo un pensamiento recurrente lo asaltaba, sabía que llegaría el día en que tendría que elegir entre su carrera y su vida personal. Esperaba que nunca llegara o que al menos tuviera la opción de tener ambos. Eso lo haría más que feliz.

El atardecer se hizo noche y él todavía estaba en el balcón, de repente un golpe en la puerta lo sacó de sus pensamientos.

"Disculpe Yibo, tiene una llamada de Qirem"

"Ok, entra y dame el teléfono...- tomando el teléfono con mala gana y llevándolo al oido- pensé que venía para alejarme de todo, ¿cuál es el problema ahora?"- contestó visiblemente molesto.

"Primero, no lo voy a repetir, ten cuidado con esa actitud, o de lo contrario estarás castigado permanentemente. Segundo, solo llamé para ver si llegaste y si realmente estabas en Shanghai o no ..."

"¿Qué? ¿Ya no confías en mí?"

"También para recordarte que no hagas nada loco o imprudente, basta con todos tus escándalos. Dales un poco de tiempo a que se disipen y date un tiempo tu también"

"¿Algo más?"

"No, nada más por ahora. Y por favor se amable con Yu Bin ... no quiero tener que pagarle los gastos de psicólogo después"

"Adiós"

Cortó y le pasó el teléfono a Yu Bin ... "Puedes retirarte, no te necesitaré más por hoy, ve a divertirte, solo asegúrate de estar aquí mañana, quiero ir al café, quiero ver cómo están las cosas por ahí "

Yu Bin solo asintió  y se despidió. Yibo volvió al balcón encendió otro cigarrillo, y comenzó a admirar las luces de la ciudad. Pensando en todo lo que tenía que hacer al día siguiente.

Zhan, se despertó sabiendo que solo quedaban unas cuantas horas para disfrutar las vacaciones, bajó a desayunar con Jiyang y su familia y le dijo que volvería al café. Jiyang simplemente puso los ojos en blanco y le dio una sonrisa. Sabiendo que no iba a persuadir a Zhan de lo contrario. Luego, fue al café y comenzó a caminar por el edificio, la última vez que había estado allí con Jiyang, no había podido recorrerlo y solo había estado en una de las alas del café. Buscaba uno de los cuadros de Wang Yibo, que había visto una vez en una revista, siguió mirando y admirando cada objeto del lugar hasta que lo encontró. Era una pintura que cubría casi toda una pared, era una lluvia de colores, blanco, rojo, negro, naranja, todo el arco íris y mucho más. Cada trazo era diferente, Zhan sabía un poco de arte contemporáneo, ya que su hermana, tomó clases cuando estaba en la escuela secundaria y el había tomado clases de diseño los primeros años en la universidad. De inmediato se sentó frente al cuadro en uno de los asientos colocados para disfrutarlos, se sentó con las piernas cruzadas y contempló cautivado por cada parte del cuadro. De repente, su teléfono sonó y contestó.

"Hey Zhan-ge ... ¿adivinas quién está en la ciudad?" Una amplia sonrisa apareció en el rostro de Zhan ... "¡¡¡Wanyin !!! ¿En serio? ¿Estás en Beijing? ... ¿Por qué? ¿Está todo bien?" – cambiando su expresión de alegría a una de preocupación.

"¡Wow! Jajaja, espera ¿qué? ... ¿por qué crees que algo anda mal? Vinimos, porque necesitábamos comprar algunas cosas y aprovechamos las vacaciones para pasear y visitar a un viejo amigo"

"¿¿Vinimos ??? Espera ... ¿¿Xichen está contigo? Ahora, Sí, estoy preocupado ... ¿qué cosas ?? "

"Es una sorpresa, ¿podemos encontrarnos? ¿Podemos ir de compras juntos o eres demasiado importante para tus amigos provincianos? Hmmm "

"¡Oh! Maldita sea, no estoy en Beijing en este momento, estoy en Shanghai con un amigo, pero volveremos mañana. ¿Estarás allí todavía? "

"¡Sí! Nos quedaremos un par de días más... Entonces, ¿un amigo? ¡Eres un descarado, Xiao Zhan!"

"Tú...!.... no digas estupideces... jajaja. Así que podemos vernos mañana por la noche, ¿te parece bien? Puedes venir a mi dormitorio y luego tal vez podamos salir y hacer algo como cenar ... o tienes otra planes? "

"Para nada, solo vinimos a verte y pasar el rato ... ¡te extrañamos!"

"Si seguro !!!"- rodando los ojos- "Ahora tienen más tiempo para ustedes, ya no soy la tercera rueda ... así que supongo que no me extrañas para nada, estás ocupado con otra 'cosa'" ...-  con una gran sonrisa

"Maldito desvergonzado, ¿en qué estás pensando Zhan-ge? ... ¡jajaja! Ok nos vemos mañana entonces. Envíame tu dirección. ¡No lo olvides!"

una sonrisa se dibujó en el rostro de Zhan, no quería admitirlo pero extrañaba mucho a sus amigos de la infancia. Jiang Wanyin y Lan Xichen, eran sus amigos desde jardín de infantes. Al entrar en la pubertad, ya los tres entendían sus preferencias, especialmente Wanyin y Xichen quienes no pudieron evitar enamorarse y desde entonces, junto con Zhan formaban un trio de amigos muy particular. Zhan solía envidiar un poco a sus amigos, el poder encontrarse y elegirse, para el era un sueño que sentía que no se le iba a dar, sobre todo viviendo en un pueblo tan pequeño. Wanyin y Xichen pasaron por muchas cosas malas cuando decidieron decirles a sus familias, sobre su relación. Por un tiempo ambos fueron echados de sus hogares y Zhan siempre estuvo allí para ellos, ya que a diferencia de Wanyin y Xichen, los padres de Xiao Zhan, eran mucho más comprensivos. El se sentía bendecido de tener una familia que siempre lo apoyo solo le pedían que se cuidara y eso mientras el fuera feliz lo aceptarían a él y a la persona que eligiera con quien compartir su vida. Desafortunadamente para Zhan, esa persona era una fantasía. Desde que Wang Yibo comenzó su carrera, tenía todos sus albums, de hecho fue su inspiración para seguir su carrera en la universidad y comenzar a bailar, solo soñaba con conocerlo. Más aún cuando Yibo comenzó a pintar, sintió que sus pinturas eran parte de él, una declaración de quién era realmente, aunque nadie las entendiera. Nunca creyó en los rumores, aunque sabía que probablemente eran ciertos y que Yibo terminaría casándose con alguna modelo, actriz o cantante, alguien más a su altura. Entonces mientras miraba el cuadro, suspiró soñando despierto, "que un día su ídolo le confesaría al mundo que era gay, y que sería solo para él, jaja", como estaba soñando demasiado, negó con la cabeza y sonrió para si mismo.

Estaba tan absorto en la pintura y su fantasía, que no notó que alguien más lo estaba mirando, o mejor dicho, admirando. Su cabello negro, perfectamente cortado, su rostro aparentemente suave y radiante, su sonrisa, oh esa sonrisa pura y radiante, esa mirada hacia el cuadro, como si le estuviera haciendo el amor y despojándose de su alma con cada suspiro. Lo miró un rato, hasta que decidió acercarse y sentarse a su lado.

"Es un verdadero desastre, ¿no?"

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Hello Hello!

Aquí les dejo el cap 2.

Nos estamos leyendo.😘😘

PD: Sí Yibo fuma en este fic, pero prometo, que será por poco tiempo...😅