El viaje de nuestras vidas

Cap. 9: "Sellando nuestro amor"

Yibo seguía pensando en la conversación que había tenido con Zuchen, luego de un par de horas, su amigo lo había convencido de que esperara. Era egoísta, lo sabía. Zhan merecía disfrutar de la fama que había ganado después de tanto trabajo. Entonces, decidió esperar hasta que la gira terminara, para luego hablar con Zhan al respecto. Esa era una decisión que debían tomar juntos.

Estaban viajando a Shanghai, Yibo había ordenado a Yu Bin, que rentaran un villa, en una zona muy exclusiva, alejados de todos y lugar ideal para las celebridades. Zhan dormía profundamente sobre el hombro izquierdo de Yibo, mientras que este último solo miraba por la ventana, disfrutando de la vista y la cercanía de su novio. Luego tomó lentamente la mano de Zhan entre las suyas y entrelazó sus dedos, nunca soltaría esa mano, eso se lo juró internamente; nunca permitiría que nadie ni nada lo separara de su Zhan-ge.

Cuando finalmente llegaron, Yibo trató de despertarlo, pero este estaba demasiado cansado por la fiesta de la noche anterior y toda la adrenalina que había pasado con el show, ya había desaparecido; así que solo se removió un poco y se acomodó nuevamente para seguir durmiendo, abrazando con fuerza el brazo de Yibo. Éste simplemente lo levantó en sus brazos, como él bebé que era para él y lo llevó a la habitación que sería de ambos durante toda la semana. Colocó a Zhan en la cama y no pudo dejar de mirarlo mientras suavemente removía ese mechón rebelde que siempre se asomaba. Le dio un beso en la mejilla y fue a preparar algo para comer, porque sabía que el otro estaría muerto de hambre en cuanto se despierte.

Un par de horas después, Zhan se despertó con el delicioso aroma de la comida. Se levantó y caminó hacia el baño como un zombi. Se miró en el espejo y no podía creer lo cansado que parecía con las bolsas y las marcas debajo de los ojos a la vista. Fue una semana increíble, con toda la práctica para el programa y las ganas de ver a Yibo; se lavó la cara y se maquilló, solo un poco, para lucir menos cansado. Estaba más que feliz de finalmente pasar algún tiempo con Yibo sin tener que esconderse. Bajó las escaleras siguiendo su olfato, cuando llegó a la cocina, vio a su novio muy concentrado en lo que hacía, por lo que se apoyó en el marco de la puerta y miró al hombre de sus sueños cocinar para él. Era surrealista, todavía se sentía como si estuviera soñando, tenía miedo de despertar.

Luego, después de un rato de observar con que concentración picaba los ingredeintes, se aclaró la garganta.

"Buenos días"

"¡Ey, conejito! ¡Buenas tardes debería decir! ¿Dormiste bien?" acercándose y atrapándolo en sus brazos y dándole un pequeño beso en sus labios.

"¡Si! Un poco demasiado, supongo ", riendo y fregando un poco los ojos.

"Bueno, debes tener hambre"

"Mucho"

Caminan hacia la isla de la cocina sin soltarse las manos, Zhan se sentó a la mesa y Yibo puso todos los platos que formaban parte del hot pot, que había preparado especialmente. Había estado un tiempo buscando recetas de alguna comida típica de la región de Zhan y había encontrado un plato fácil, hecho con fideos.

"¡¡Guau!! Esto se ve genial ... ¿cómo ... ??? "

"¿Qué? ¿Pensabas que no sabía cocinar? Bueno, le faltan algunos ingredientes, pero lo básico está ahí y además es todo lo que tengo aquí para preparar, ¡espero que te guste! " dijo Yibo con una sonrisa en su rostro.

"Estás lleno de sorpresas... ¡¡Gracias !! ¡Se ve genial !, ¿tú no vas a comer, o prefieres esperar a ver si no necesitas llamar a una ambulancia ??? " dijo con una mirada picara y burlona. Sabía de las habilidades culinarias de su novio, debido a todos los programas en los que lo había visto cocinar y sabía que solía gustarle los sabores fuertes, pero confiaba en él, solo quería molestarlo un poco. Yibo lo miró haciendo un puchero.