El viaje de nuestras vidas

Cap. 8: "Dulce como la miel"

El regreso de Wang Yibo fue un éxito y la actuación de Xiao Zhan también fue noticia. Se convirtió en el favorito del programa. Ahora la presentación final estaba cerca y necesitaba estar preparado. La primera parte fue una sesión de fotos, se veía increíble. Las fotos de los ocho concursantes restantes se mostraron en una página web especial donde serían votadas por el público. Jiyang y los demás también fueron elegidos y compartieron la suerte de Zhan. Mientras tanto, Yibo y Zhan estaban tratando de descubrir cómo vivir su romance. Besos escondidos, risas y cenas compartidas. Se lo tomaron con calma, muy lento, sabían lo que estaba en juego, la fama y el trabajo de Yibo y la posibilidad de Zhan de hacer realidad su sueño.

"Entonces, ¿cómo va todo, ZhanZhan?" Dijo Yibo todo dulce abrazándolo. Estaban en el estudio de Yibo con la complicidad de Yu Bin, quien se convirtió en un importante aliado de su relación.

"No estoy seguro de la canción que elegí y hay una nota que encontré difícil de manejar". Respondió Zhan haciendo pequeños círculos con su dedo en el pecho de Yibo.

"¿Necesitas mi ayuda?" tomando las manos de Zhan y dando pequeños besos a sus dedos.

"No, no te preocupes, tengo que hacerlo yo solo. Además, no sería justo para los demás". Yibo lo besó en la frente. Entendiendo lo que estaba diciendo.

"¡Ok amor!" Luego le agarró la barbilla de con sus dedos y la levantó un poco para darle un beso corto y dulce como los que habían compartido últimamente. De repente, alguien llamó a la puerta.

"¿Quién es?" Dijo Yibo sin soltarlo de su abrazo.

"Es Yu Bin, ... QiRen te está llamando a su oficina."

"¿Qué es lo que quiere ahora?" Dijo silenciosamente. "Está bien. Estaré allí en un minuto"

"¿Está todo bien?" lo miró un poco preocupado, a pesar de que habían sido cuidadosos, nunca se sabía quien podía estar mirando. Zhan se preocupaba muchísimo, no tanto por él sino por la carrera de Yibo.

"Sí,... no te preocupes. Probablemente sea para hablar de los próximos conciertos y promociones". le contestó con una sonrisa segura.

"Tendrás que viajar, ¿no?"

"¡Si!"

"Te extrañaré" haciendo pucheros un poco.

"Yo también te extrañaré" dándole un beso. "Pero ya sabes cómo es esto, me gustaría poder llevarte conmigo".

"Bueno, yo también estaré ocupado, supongo, pero prométeme que haremos un viaje juntos después de que termine tu gira. ¿Ok?"

"Todo lo que quieras mi conejito". uniendo sus frentes y naríz.

"¡Bien! Y tienes que prometerme entradas gratis para tus conciertos, para mí, mis amigos y mi familia".

"Ok ... ¿algo más? ¿Su majestad?" Riendo

"Sí ... más besos y tu corazón y tu alma."

"Esas son las cosas más fáciles de darte, ... y las otras dos ya son tuyas".

"¿Podemos ser más cursis?" riendo fuerte.

"¡Jaja! Me haces tan feliz, A-Zhan."

"¡Tú también Bobo!" Besando a su hombre.

Una vez en la oficina de QiRen, Yibo entró con su aire de siempre y se sentó en la silla con altanería, pero había algo diferente en su porte, algo que no había pasado desapercibido para QiRen, quién a pesar de dejarlo hacer lo que quisiera, siempre lo tenía vigilado...