Anhelo del Corazón

Capitulo 6: Casualidades

Habían transcurrido dos meses de aquel encuentro entre Hinata y Kakashi en los pasillos de la Universidad y a la fecha mantenían una relación de alumno-profesor incomoda, pero soportable. Por su parte Hinata no podía negar que la clase del peliplata era su favorita, él era un hombre brillante, su manera de hablar envolvía a la audiencia como en una especie de hechizo, su forma de expresarse era de una elegancia de la cual no era consciente.

La chica de ojos perlados, cayó en cuenta que también había sido hechizada por aquel hombre, y le era inevitable sentir como sus mejillas se ruborizaban cuando sus miradas se encontraban en medio de la clase lo que desprendía una enorme confusión en ella, ya que, por mucho que intentara auto convencerse de que aquella situación no era más que una simple casualidad, se fueron volviendo cada vez más frecuentes. Algo en su interior la hacía sentir intranquila y a veces solo a veces se dejaba arrastrar por sus fantasías, pensando que aquellas miradas eran algo más que simpatía, lo que hacía que se sintiera como una tonta al volver a la realidad.

Era una tarde como cualquier otra dentro de la universidad y para esas horas ella se encontraba cumpliendo el turno en su trabajo de medio tiempo en la cafetería de la facultad que había conseguido dos días antes de comenzar sus estudios, ese trabajo le permitía costear ciertos gastos que no eran cubiertos por su beca, sin embargo, ese día se encontraba un poco más cansada de lo habitual, debido a cierto ensayo que se quedó redactando hasta las 03:00 AM. Ciertamente su idea era continuar con el al día siguiente, pero al comenzarlo sintió como la inspiración se apoderaba de ella y el teclado de su laptop no paro hasta insertar el punto final al ensayo. Al terminarlo sintió un dejo de orgullo, hasta que observo la hora en el reloj de su escritorio, soltando así un suspiro de resignación al estar consciente del deplorable estado en el que se encontraría horas más tardes.

Hinata tenía sus ojos entre abiertos tratando de resistirse inminente cansancio que la invadía, cuando en la cafetería se dejaba ver cierto hombre de cabello color plata, acomodándose en el que ya era su lugar habitual siendo cerca de las 16:00 hrs. La cafetería contaba con poca afluencia de público, por lo que, ya era costumbre ser la encargada de tomar el pedido de aquel hombre, bueno más bien de saludarlo para entregarle un su café expresó doble sin azúcar como casi todos los días.

Kakashi como de costumbre buscaba con la mirada a Hinata en medio de la cafetería, para que al verlo le pudiese dedicar su habitual sonrisa despreocupada, mientras esperaba que ella trajera su pedido al tiempo que leía cierto librito de caratula de color verde.

El peliplata llevaba aproximadamente un mes y medio frecuentando aquel lugar, el cual curiosamente antes de cierto encuentro apenas conocía y hoy por hoy era un cliente frecuente. El llevaba a lo menos unos cinco años en la universidad, sin embargo, esa cafería solo la había visitado en dos oportunidades cuando mucho, pero todo cambio un día que se encontraba conversando con Gai.

Inicio de flash back

–¿Qué te ocurre Kakashi?, no me has prestado atención, en nada de lo que te he dicho. –Suminasen decía un peliplata al tiempo que apoyaba su mano en la nuca con el codo en el aire y una sonrisa despreocupada. –No me engañas Kakashi, sé que algo te ocurre te ves diferente. –No es nada Gai, en serio. –Como tú digas, si no me quieres contar no insistiré, sin embargo, en compensación me compraras dangos en la cafetería de la facultad. –¡Eeeee! Está bien, tú ganas Gai vamos. Dijo un Kakashi con tono de resignación.

Minutos más tardes tanto Gai como Kakashi se adentraban a la cafetería de la facultad. –Gai continuaba con el interrogatorio, sin embargo, el peliplata solo le trasmitía en tono amable que se equivocaba ya que no le pasaba nada, al tiempo que hacia un sube y baja con su mano derecha mientras colocaba su mano en la nuca y cerraba los ojos adoptando una actitud desenfadada ante las acusaciones de Gai. –No importa que no me lo quieras contar Kakashi sabes bien que tarde o temprano la fuerza de la amistad derribará todos los obstáculos, solo es cuestión tiempo el que me entere.