Imagina un beso a ojos cerrados, donde los labios se abrazan, se conocen y se derriten en el momento, donde las manos se confunden, se pierden y deambulan bailando en la nada, donde los latidos son más fuertes y se siente como si fuese a explotar el corazón de la ansiedad que producen nuestros labios y la respiración agitada como el golpe al final de una cascada, donde el cuerpo se siente liviano y se eleva lentamente, separándonos del mundo por un instante; ese instante donde un acto se divide en muchos más, ese instante donde el pasado se desvanece en el olvido y el recuerdo del beso en el aire se impregna en nuestras mentes, probablemente, por la eternidad de tus labios. Imagina, ese beso a ojos cerrados.
Eres un sueño bonito, con esa sonrisa bonita y los ojos interesantes repletos de vida; esa vida que anhelo en la mía, tenerte a mi lado, con tu mano en mi mano, caminando sin pensar en qué pasará, sólo construyendo un futuro bonito donde no paremos de reír y aunque seamos conscientes de que es sumamente difícil, lo vamos a lograr. Yo creo en ti y sé que tú crees en mi, sólo te pido que no te rindas y que camines conmigo hasta el final, ¿de que? No lo sé pero te aseguro que nada saldrá mal y si tiene pinta de que así será, lo vamos a superar. Y así seguirás siendo, para mi, un sueño bonito, de esos que no se olvidan, que permanecen por la mente hasta la muerte; sueño bonito que no se olvida y lo recuerdas hasta los últimos días, eso eres... Lo mejor.
Aún pienso que el amarillo se te observa hermoso, quizás sea porque es mi color favorito pero en ocasiones pienso que, realmente, se te ve precioso y me encanta... No me gustaría compararte con girasoles, esta vez, no te comparare con nada, sólo eres tú luciendo mi color favorito, sólo eres tú siendo hermosa como siempre. Para mis ojos, eres lo más hermoso y seguiré observándote como la chica de ojos color Venus, o como mi Saturno y dime cómo no sentirme afortunado, cuando tus ojos brillan al sonreír y tus mejillas se elevan sonrojándose, hasta que tus ojitos se achinan y tu rostro se ilumina... Ese momento es, simplemente hermoso o hasta más que hermoso, sólo que aún no encuentro esa palabra que te defina completamente.
Sólo diré que en ti dibujaré estrellas, constelaciones siguiendo tus lunares. Que cliché, decir que los lunares son estrellas pero que falta de amor no disfrutar cada cliché con quien amas y siempre lo diré; seré ese astronauta que se pierda en los mares de tus lunares, acariciando y deleitando tu dulce piel con mis dedos torpes. Oh, y ese lunar que en tu mano habita, ese que es similar a la galaxia tan rara que parece una medusa, cuanto no daría por acariciarlo lentamente y amarlo hasta que el amor sea un delito, amarlo hasta que mi mente olvide cosas y mis manos tiemblen sin control, hasta que mi cabello se pinte de blanco, amarlo hasta que mis pulmones ya no consuman aire del inmenso mundo. Adoro cada pequeño rincón de tu cuerpo, esos que guardas en lo más profundo, esos que se deben amar con el alma, por ti y por mi.
Por las noches observo esas estrellas que llevan tu nombre, esas que brillan muchísimo más que las otras y, si tuviese la capacidad de volar, elevarme hasta el espacio e intentar llegar a esas estrellas, lo haría, solamente para que las tengas...
Entre tus ojos y tus cejas, ahí es donde quiero estar. Entre tus labios y tus brazos, ahí es donde quiero permanecer. Entre tu piel y tu alma, ahí es donde quiero habitar. Entre las sabanas, los deseos y nuestras ánimas, pensando en qué me puedes hacer, pensando en cómo te voy a amar por el resto de mis días.
Te amaré hasta donde el universo me lleve. Te ame, te amo y te amaré, tres veces y aún no me canso ni me cansaré, por nada ni nadie en el mundo, sólo deseo permanecer a tu lado, cuidarte como me lo pediste y amarte como igualmente lo haces, hacerte entender muchas cosas y recordarte cuanto te amo mediante estos escritos que, probablemente, ya ni tengan sentido pero salen de aquí, de un corazón que te pertenece, de un corazón habitable para ti, donde nada malo te pasara y sólo amor puro sentirás, así siempre será. No hay porque prometer todo, sabes que siempre estaré y que nunca me iré, podrás preguntarme mil veces lo mismo y mi respuesta siempre será la misma porque te ame, te amo y te amaré, por siempre y para siempre.
Para: My little princess