Fue como si las estrellas hablaran, fue como si el mundo me susurrara, fue como si las nubes me acariciaran; el sonido de tu voz acercándose pasivamente, paso por paso, esos susurros suaves que venían de ti... Que calma me da tu voz... ¿Yo le doy calma a tu alma? Esos ojos agobiados por la tristeza, a pesar de eso se asoma esa sonrisa pura de ternura, tu mirada inocente y cansada me empujan a cuidar de tu alma, de tu ser, me empujan a protegerte con mis brazos, no importa si salen lastimados, eres tú quien no debe sufrir más... Quiero cuidar ese corazón y seguir recogiendo cada trozo que has dejado en el trayecto hasta lo que es ahora, armarlo, amarlo, cuidarlo y guardarlo en un lugar seguro, un lugar entre mi corazón y mis pulmones... Quien desee lastimarte debe quitarme la respiración o el corazón...
«¿Te hago feliz?» Esa pregunta que recorre mi mente cada día, tan preocupado estoy de tu felicidad que no quiero ser yo, inconscientemente, el que te lastime. No sé si soy bueno para ti, no sé si he logrado hacerte feliz, no diré que completamente, porque la otra parte debes darla tú pero ese lugar en ti, que debo llenar yo... Esa pregunta de saber si realmente te hago feliz, si mi estupidez es suficiente, si mi cariño es adecuado, si preocuparme tanto y estar ahí es lo correcto. ¿Soy, realmente, yo?
No sabes absolutamente nada de lo que siento, podría explicartelo con todas las palabras del mundo pero soy tan ignorante que no las conozco todas. Desearía que con el simple hecho de que vieras mis ojos, entendieras el porque hago todo esto, por qué siempre estoy, por qué siempre te cuido... Lo entenderías. Pero solamente tengo escritos que en ocasiones pasan de ser únicos a repetitivos, no tengo la manera de expresarte todo lo que me hace sentir tu existencia, sí, sólo tu existencia hace que mi mundo alrededor cambie y eso es increíblemente maravilloso...
Quiero que seas feliz y si es de dar parte de mi felicidad o toda... Lo haría, solamente para observar lo feliz que llegarías a ser... Como amo esa manera de pensar, única en ciertos sentidos, preciosa en muchos y adorable en todos.
Sí, deseo casarme contigo pero ya no es un deseo, es una decisión de los dos y es hermoso ¿no?
Darte todo este amor que me queda es la mejor decisión y haberte pedido matrimonio es otra que jamás, obviamente, olvidaré.Eres todo, para mi eres perfecta tal y como sueles ser, así tengas ese cabello desordenado o tu rostro hinchado y marcado de tanto dormir.
Así digas que no eres hermosa, mis ojos te verán como lo mejor. Probablemente no ses suficiente para ti o sí lo es, igualmente, lo seguiré haciendo, seguiré amandote de esta manera y te cuidare como tanto te lo prometí...Cuidare de esos ojos, de ese cabello y por supuesto, de tu salud. Cuando estes enferma, cuando te sientas mal, cuando ya no puedas más, ahí estaré...
Sí... Recuérdalo siempreSiempre, no importa como este el mundo, ahí estaré, así el cielo se este cayendo, si las estrellas caen, no importa... Ahí estaré.
Y muchos dirán que es estúpido...
Pero más estúpido es aquel que no disfruta el amor.Te amo y siempre te amare, hasta el infinito, hasta siempre...
Te amo y confía en mi.
Con amor: tu esposo.