Ya comenzaban las primeras evaluaciones y eso mantenía estresados a todos los alumnos, se respiraba estrés, locura, insomnio, enemistad, odio a los docentes, odio a los alumnos, odio a sí mismos, pura negatividad en su máximo esplendor.
Hacía lindo día pero en ese estado —con ese ánimo— convertía cada rayo de sol en un buen motivo para traer mala cara, el fastidio era superior a sus trabajos por entregar y superior a sus horas dormidas.
—¿Solo eso va a entregar? Déjeme recordarle que es la primera evaluación y eso no significa que no importe, todas cuentan y si quiere dejar a la deriva su vida estudiantil yo no seré quien se lo impida.
—Perdí parte del trabajo final, ¿podría entregarlos después?
—Fui claro, no desfases en sus trabajos.
—Pero...
—Dije que no señor Choi, ¿quiere entregarme su trabajo incompleto o se queda con su cero? —el profesor extendió su mano para recibir el trabajo.
—Tenga.
Después de eso decidió volver a su asiento, quedaban pocos alumnos por entregar el trabajo, recibió un mensaje de su amigo y se sintió mejor, Kai siempre se preocupaba por desearle un buen día, después recordó un pequeño detalle, sus amigos solo eran un puente entre él y Soobin, siempre compartiría amigos con él.
Se sumió en su océano de pesares y pensamientos, no notó cuando sus compañeros salieron, ni notó cuando Beomgyu llegó corriendo junto a Kai.
—¡Hyung! —ambas voces sonaron por todo el lugar y eso lo hizo sorprenderse, mirando a su alrededor detectando solo dos figuras.
—¿Y los demás?
—Supongo que no están, ¿acaso los ves? —una tercera voz se escuchó en aquella aula, era Taehyun y venía acompañado.
—¿Vamos a comer? Hoy mi mamá me mandó unos ricos panes y quiero compartirlos —el menor de todos mostró su mochilita donde llevaba su comida.
—¡Vamos! —Beomgyu tomó del brazo al menor y lo jaló llevándose una queja del menor.
Soobin suspiró y fue detrás de los dos, Taehyun en cambio guardó silencio mientras observaba a su mayor, Yeonjun temía a esa mirada por eso prefirió mirar todo menos a él. Cinco minutos después Tae pateó una banca y salió; "es momento de salir". Eso pensó Yeon después de ver a su amigo dejarlo solo, lo alcanzó rápido prosiguiendo en silencio y era uno demasiado incómodo.
Taehyun se detuvo a sacar unas latas de la máquina expendedora y Yeonjun esperó detrás de él, cuando su tarea se vio finalizada, su silencio también lo hizo.
—¿Por qué no hablas?
—No tengo que agregar.
—¿No? ¿Por qué no simplemente nos dices que ya no quieres estar con nosotros? Podrías evitarte esto, ¿crees que no vi cómo evitas su mirada? Kai y Beom no pueden siempre mantener el buen ánimo y yo no estoy dispuesto a enfrentar todos los días la incomodidad.
—Lamento hacerlos sentir así.
—Deberías tratar de arreglarlo, no por nosotros.
—Lo sé pero quedo desarmado por que él tiene motivos para no hablarme, para que yo no le hable.
—Hyung, nada es imposible solo es difícil pero si perseveras las cosas irán mejor.
—Gracias Tae.
Volvieron a su silencioso andar, esta vez mucho mas tranquilo.
Taehyun le dió una bebida y le sonrió, eso animó a Yeonjun.
Poco antes de reunirse con el resto pudo ver como un chico se acercaba a Soobin y le ofrecía un bocadillo, el cual fue rechazado por Kai quien mostraba su mochila y pronunciaba cosas inaudibles hasta la distancia donde estaba, Soobin parecía en shock y Beom reía junto a Kai.
—¿Qué fue eso? —llegaron y Taehyun no espero a preguntar, poniendo a su vez las bebidas.
—Otro pretendiente —Kai contesto mientras le pasaba una lata a Gyu —. Cada día se suman más a la lista, ¿debería hacer una en donde me ponga a predecir quién es el siguiente? Desde que Soobinnie hyung y Yeonjunnie hyung...
La voz de Kai se apagó abruptamente y mientras Gyu y Tae decidieron mirarse incómodos, Hyuka prefirió mirar a su mochila y sacar lo que traía.
—¿Estos panes son los que tu mamá cocina especialmente para Soobin hyung?
—Sí —Taehyun y Kai compartieron palabras para calmar el ambiente—. Hyung, toma uno.
—No gracias, ¿sabes? No deberías responder por mi cada que uno de esos chicos o chicas viene, yo puedo negarles si así lo prefiero.
—Kai pensó que te molestaba, ya sabes tú en un principio pedías que les dijéramos que no para que Yeonjun no...¡auch! Lo siento —Beomgyu se sobó el brazo después del golpe que le dió Taehyun.
—Da igual, Kai no volverá a hacerlo, ¿cierto?
—Sí
Después de que los menores se callaron Yeonjun tuvo la necesidad de acabar con ese abismo de silencio que cada vez se hacía más y más molesto.
—Soobin toma uno, no los rechazarás, ¿verdad? —sonrió un poco y tomó uno de los pequeños panes, sus menores imitaron la acción esperando que Soobin lo hiciera pero eso no pasó, el chico prefirió pararse—, ¿no quieres? ¿a dónde iras? Soobin, Kai los trajo para compartir y su mamá los preparó con cariño, ¿serás así de descortés? —podía mirar su silueta pero no a sus ojos, de alguna forma el chico lograba esquivar su mirada y eso solo le frustraba—, ¿no te importa como se sentirá Kai?
—A diferencia de ti, yo sí pienso en los sentimientos de los demás, no debo decirte a dónde voy y si no te molesta, ¿de dónde has sacado ese discurso emotivo? Tú jamás podrías decir esas palabras, no quiero comer contigo, es lo único y creo que será mejor no verte un rato Yeon.
—¿Todo esto es mi culpa?
—¿Y si bajan la voz? Algunos comienzan a mirar —Beom miraba incómodo a su alrededor, Kai tomaba fuertemente su mochila viendo a ambos chicos, Taehyun trataba de mantenerse sereno tomando su bebida y viendo un punto fijo. Eso fue suficiente para que Yeonjun creyera que no debían seguir con eso.
—Claro, es tu culpa. Pudiste haberme dicho que no te gustaba lo suficiente o mejor aún, que solo tratabas de subir tu ego con mi atención. Déjame en paz. Kai guárdame un pan, hoy no comeré aquí chicos.
—Soobin.
El chico se fue y aunque Yeonjun quería hacer lo mismo se quedó. Al día siguiente simplemente evitó a Kai y Beom, al siguiente día también, después el resto de la semana y las siguientes también hasta que al igual que Taehyun se resignaron a dejarlo en paz, Soobin siguió comiendo con ellos y Yeonjun lo miraba de lejos.
Si tan solo hubiera hablado con Soobin antes, si hubiera sido sincero, si hubiera hecho diferente las cosas su grupo de amigos no estaría ahí, aunque igual y estuvo bien, no se veían incómodos.
