Vestigio de Luna Llena ✨ [HuaLian]

✨ Capitulo tres ✨

«————»

¿El amor a primera vista?
Es raro de ver y es espontáneo, solo existe esa conexión cuando alguien es "especial".

Algo que realmente se anhela.

«————»

•

El Príncipe sintió que podía hibernar en su descanso. Los momentos que había experimentado en todo el día todavía rondaban por su mente, siendo el rostro de aquel "General Hua", el último en recordar antes de despertar.

Abrió sus ojos lentamente y parpadeó ante la luz excesiva del lugar. Estaba cubierto por unas sabanas blancas y sedosas, acostado en una cama lujosa en medio de una gran habitación. Observó por unos momentos el gran ventanal abierto por donde entraba la luz del sol mañanero, hasta que salió de su ensoñación.

Estaba en el Palacio Real, en la misma cama que usaba todos los días, con las mismas ropas blancas, holgadas y suaves de siempre; nada exótico ni provocativo, por fortuna.

De pronto, la puerta se abrió y entraron dos personas. Eran Feng Xin y Mu Qing, quienes se sorprendieron un poco y se acercaron a él.

Feng Xin lo miró cuidadosamente, como si buscara alguna herida o algo fuera de lo normal y a pesar de que este trataba de disimular su mirada expectante, Xie Lian se dio cuenta, pero decidió pasarlo por alto.

Feng Xin al notar que estaba bien, preguntó — ¿Ha descansado bien, Su Alteza?

—Si, no hay de que preocuparse, gracias Feng Xin.

Mu Qing, quien tenia sus brazos ocupados con un conjunto elaborado para el príncipe y una leve expresión de descontento, aclaró su garganta y se dirigió a él —Su Alteza, es bueno que esté despierto. Los Reyes lo solicitan en el salón principal, es importante.

Xie Lian asintió, y se levantó de la cama para preparar su vestuario diario con la ayuda de sus dos asistentes más cercanos. Era un día común como todos los demás, simplemente tenía que seguir la rutina.

Al salir de su habitación, dirigiéndose al salón principal, pensó en lo que había sucedido antes. Parecía que nada había cambiado, pero su mente y corazón habían sido grabados los recuerdos del pueblo y su gente, incluyendo a los rufianes y a las damas que le ayudaron; podía recordar el momento en que se unió a las danzas en aquel escenario y por supuesto...

La mirada interesante y cálida de aquel joven.

Xie Lian tocó instintivamente el centro de su pecho, como si su corazón se detuviera por un segundo.

A pesar de que parecían ser experiencias recientes, solo podía recordarlas como si hubiesen sido un simple sueño o un producto de su imaginación. Se sintió triste y anonadado, aunque intentara negarlo, era lo más lógico para él. Nadie en el palacio había mencionado nada y todo estaba tranquilo.

Es como si nada de eso hubiese sucedido. Mientras más insistía en recordar, más sentía que muchas partes de ese sueño estaban nubladas y confusas, como si tuviese un bloqueo.

Desafortunadamente, no pudo pensar mucho en ello, ya que había llegado al salón principal, donde los reyes le esperaban sentados en sus extravagantes tronos con suntuosos detalles dorados. Ambos esperaban a Xie Lian, sin embargo, el aura que desprendía cada uno era diferente.