Me levanto a la medianoche, inquieto por algo, y decido asomarme por la ventana. Afuera, una tormenta eléctrica empieza a desatarse con fuerza. Los truenos retumban y los relámpagos iluminan el cielo. De repente, un rayo cae cerca, iluminando toda la habitación. Isis se levanta asustada, con los ojos muy abiertos y el cuerpo temblando.
Me acerco rápidamente a ella, preocupado por su reacción.
Yo - (Preocupado): "¿Estás bien? ¿Qué pasó?"
Ella me mira con miedo en sus ojos y se aferra a mí, temblando.
Isis - (Asustada, temblando): "Me asustan los rayos." - (Me abraza muy fuerte) -
Siento la necesidad de tranquilizarla, de hacerle sentir segura.
Yo - (Protector): "Tranquila, yo te voy a proteger."
Ella me mira, aún temblando, buscando seguridad en mis palabras.
Isis - (Curiosa): "¿Cómo?"
Decido mostrarle que no tiene nada que temer. Me acuesto con ella y la abrazo con fuerza, envolviéndola en mis brazos.
Yo - (Calmante): "Mira."
Siento cómo su respiración empieza a calmarse, y ella se relaja en mis brazos.
Isis - (Aliviada): "Sí, es verdad, gracias." - (Me abraza más fuerte y más tranquila) -
La siento más tranquila ahora, su temblor disminuyendo mientras se acomoda más cerca de mí.
Yo - (Suave): "De nada."
Nos quedamos así, abrazados y sintiendo el calor y la seguridad del otro. La tormenta sigue rugiendo afuera, pero dentro de la habitación, hay una sensación de paz y seguridad. Dormimos hasta la mañana, reconfortados por nuestra cercanía y el apoyo mutuo.
Al día siguiente en la mañana, me despierto y noto que Isis está volteada, con sus pies cerca de mi cara. Al asomarme, veo que está jugando con mi pene, lo que me hace sonreír.
Yo - (Amable): "Buenos días, Isis. ¿Cómo amaneces?"
Isis se gira un poco, sonriendo mientras sigue con su actividad.
Isis - (Juguetona): "Buenos días, Jesús. Yo bien, ¿y tú?" - (Le da un beso a mi pene) -
La sensación es agradable y me hace sentir aún más conectado con ella.
Yo - (Contento): "Bien. Una pregunta."
Ella se detiene un momento, mirándome con curiosidad.
Isis - (Curiosa): "Sí, dime." - (Se pone mi pene en la mejilla y lo frota) -
La visión y la sensación me llenan de una mezcla de diversión y excitación.
Yo - (Intrigado): "¿Qué haces con mi pene?"
Isis sonríe, claramente disfrutando del momento.
Isis - (Divertida): "Juego un poco, ¿te molesta?"
Sacudo la cabeza, disfrutando de su jugueteo.
Yo - (Sonriendo): "No, para nada. Me divierte, sigue si quieres."
Ella se acerca, dándome un beso suave en los labios mientras continúa frotándose con mi pene.
Isis - (Agradecida): "Gracias." - (Se frota el pene en la vagina y vuelve a jugar con él) -
Nos quedamos así, disfrutando de la cercanía y la intimidad del momento, sintiendo la conexión y el placer mutuo.
Agarro mi teléfono y le pregunto a Isis si le puedo tomar una foto en esa posición. Ella me mira con una sonrisa juguetona y responde:
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Los Pies de Isis
RomanceCuando Jesús recibe una inesperada visita de su amiga Isis, lo que comienza como una simple reunión se convierte en una exploración profunda de deseos ocultos y secretos inconfesables. A medida que su relación evoluciona, se descubren a sí mismos en...