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Las manos cálidas de Minyeon acariciaron el rostro del menor, trataba de hacer que despertara de aquel largo sueño que seguramente estaba teniendo su hijo

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Las manos cálidas de Minyeon acariciaron el rostro del menor, trataba de hacer que despertara de aquel largo sueño que seguramente estaba teniendo su hijo.

— Taehyunnie, es hora de despertar.

Los ojos cansados del menor se abrieron pesadamente, miro a su madre quien seguía acariciando su rostro, Minyeon sonrió y se levantó para darle su ropa para que comenzara a cambiarse. El menor solo la miro sin moverse de aquella posición en su lugar de la cama.

— ¿No esperas levantarte?, Taehyun, se hará tarde si no te apuras. — se acercó a él, quito las sábanas de su cuerpo y con un poco de trabajo lo levantó.

TaeHyun hizo muecas de dolor, le dolía todo, sus piernas, sus brazos, dios, todo en él dolía y realmente era difícil de soportar, Minyeon quito el pijama del menor cuando iba a pasar el pantalón por las piernas pequeñas del menor, paró su acto, los hematomas ya fusionados con un morado y un negro bastante oscuro estaban ocupando la mayor parte de las piernas, ella con el ceño fruncido toco con su dedo, Taehyun paró su mano.

— Mami, no toques que duele mucho.

Lo miro a los ojos y luego posó sus ojos en los brazos del menor, alzó la pequeña remera de manga larga y los mismos hematomas estaban creciendo ahí, tapó su boca sorprendida, lo miro.

— ¿Pero que te ha pasado Taehyun?...

Las palabras de Minyeon asustaron al pequeño, ¿Qué se supone debía decirle?, se encogió de hombros y aguantó el puchero en sus labios, las manos de la señora lo tomaron de los hombros lastimando a su hijo.

— ¡Dime quien lo hizo!, ¡¿Fue ese tonto hijo del granjero?!, ¡¿Fue Choi?!.

Las palabras del menor se atascaron en su garganta, un nudo se formó en su estómago y sus ojos se llenaron de lágrimas, tenía que decirle que aquel niño que es su único amigo no había sido el culpable de tremenda atrocidad, que él ni siquiera sería capas de tocarlo como lo había hecho el señor Byreom.

— ¡Dime algo Taehyun!, ¿Acaso quieres que te castigue?.

La palabra castigar ahora resonaba en su cabeza como una palabra aterradora, miro a su madre y se soltó a llorar, no quería un castigo ahora de su madre, él estaba agotado y adolorido, él solo quería dormir y ser llenado de mimos por parte de Beomgyu.

— Mamá...— soltó en un tono temeroso, sus ojitos y mejillas empañadas de lágrimas — Beomgyu Hyung no fue quien lo hizo, él no fue, Hyung es buena persona, nunca lo haría... nunca me lo haría...

— Deja de defenderlo, gente como él realmente es una porqueria, sabía que no debía dejarte ser amigo de ese niño, ¿Acaso sabes como son sus padres?, él lo aprendió de ellos, no me quiero imaginar que más aprenderá dentro de unos años.

— Mamá, Hyung no es lo que dices — sorbió de su nariz.

Minyeon alzó su mano para darle un doloroso golpe, pero pequeños golpes a la ventana de su hijo la hizo parar, camino hasta aquel balcón, asomó su cabeza y lo primero que encontró fue al pequeño y único hijo de los Choi, los ojos eufóricos de la señora Kang no se hicieron esperar, tomó a Taehyun del brazo sin tener ningún cuidado y lo hizo bajar hasta llegar a la puerta de entrada donde Beomgyu se encontraba.

Heather...[BeomHyun]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora