Backstage; J.jk

VIII

Finalmente, me limpié las lágrimas amargas que tenía en la cara y arreglé mi maquillaje, conseguí que Jungkook tuviera un tiempo libre mientras yo hablaba con los directivos y después de alistarme, me dirigí al segundo edificio de la agencia hacia la sala de juntas donde ya estaban ambos hombres fundidos en trajes elegantes, sentados uno frente a otro y mi lugar reservado en la cabeza de la gran mesa color caoba.

—. Buenos días, señores. Veo que llegaron antes que yo.—saludé sentándome en la silla. Ambos hombres se acomodaron y me miraron atentos—. No quiero divagar, así que vayamos al grano. Bang me habló sobre su inconformidad con debutar a Jungkook.

—. Así es, señorita Yoo.—comenzó Han colocando sus codos sobre la mesa.—. Fue una decisión que no consultó con nosotros y aunque él sigue siendo dueño de la empresa, nosotros podemos quitar muchos ingresos de Big Hit si quisiéramos.

—. Estoy consciente de ello.—dije fingiendo una sonrisa—. La cuestión aquí es una de dos. Convénzanme sobre por qué no debutar a Jeon Jungkook o yo los convenceré de por qué debería quedarse.

—. Bueno, comencemos por el hecho de que es un adulto y la industria está rodeada de adolescentes y adultos jóvenes.—mencionó So encogiéndose de hombros—. Además que el joven Jeon está pasado de moda.

—. Jamás había escuchado un término tan anticuado para referirse a un artista.—dije bufando.

—. Han pasado siete años, Yeo Reum. Las cosas cambian todo el tiempo, la música es una de ellas. Los idols como Jungkook ya no son viables.

—. ¿Entonces está diciendo que Jeon Jungkook ya no es material para vender? Estamos hablando de un idol de talla internacional.—respondí recargándome totalmente en el respaldo de la silla.

—. ¿Usted de verdad cree que las fans dejarán toda su confianza en un idol casi olvidado y problemático en vez de darle su apoyo a grupos actuales como TXT o incluso su grupo a punto de debutar?

—. Pareciera como si no conociera a las fans.—comenté rodando los ojos.

—. ¿Sabe por qué está en ese puesto en este momento, señorita Yeo Reum?—preguntó mirándome con los ojos entrecerrados. Yo solté un suspiro.

—. Porque soy una empleada competente y con potencial de hacer la empresa mucho mejor de lo que ustedes tres alguna vez pudieron.

Bueno, había tenido una mañana dura. Definitivamente no estaba de humor, y sinceramente a este punto ya no me importaban los honoríficos en la conversación y el tratar de medir mis palabras. Ya no quería tener filtros, y mucho menos frente a estos hombres.

—So carraspeó y negó cortamente mientras seguía hablando—. Bang la puso aquí porque tiene potencial, siempre lo supo, ¿entonces por qué no lo hizo desde un inicio? ¿Por qué no pasó a ese maravilloso puesto de inmediato?—preguntó capciosamente—. Le diré por qué; porque el medio del entretenimiento es un terreno donde solamente hombres han podido innovar.

Hasta. Aquí.

Si yo tenía un problema con Bang por aparentemente ser insuficiente, estos hombres se estaban metiendo directamente con mi género y mi experiencia, y cuando se trata de intentar hacerme menos por alguna de esos dos factores, no hay forma viable de que ellos tampoco salgan con el ego herido.

Si ellos podían ofenderme, yo también podía entonces.

—. ¿Quiere saber entonces por qué sus grupos no tienen el éxito al que aspiran?—pregunté enarcando una ceja junto con mi sonrisa socarrona mientras intercambiaba mis ojos entre ambos de sus rostros impactados—. Porque los entrenan hombres idiotas.