Comprometidos(BORUSARA)

Epílogo

~Cinco años después~

-¡Kyouske!¡Ven aquí!- Un pequeño rubio de ojos rojos era perseguido por su padre. 

-¡No quiero! ¡No me voy a bañar contigo!- EL revoltoso niño le sacó la lengua a su padre mientras corría escaleras arriba con el culito al aire.- ¡Mamá! - desde luego, su hijo tenía el carácter de Boruto, y como él mismo, quería a sarada para sí solo. 

-¡Kyouske, no hagas ruido Mama está durmiendo a Aki!- Porque si, Sarada volvió a tener un bebé tres años después del primero. Una hermosa niña de cabello y ojos azules, idéntica a su padre, no por nada sería la niña de papá.

El pequeño niño entro a la habitación de su hermana, encontrándose a su madre en este, junto con su hermana en su pequeña cama.

-Mama- Bajó el volumen de su voz para no ser regañado mientras abrazaba la pierna de sarada.

-Kyouske- se sorprendió volteando su mirada a su hijo.-¿Qué haces desnudo? ¿No te estabas bañando?-

-Si, pero yo no me quiero bañar con papá, quiero bañarme con mamá.- Desde luego, el niño iba a lo que iba. En ese momento Boruto entró a la habitación.- Vamos a salir para no despertar a Aki.-EL pequeño asintió mientras que Boruto solo se limitó a girarse hacia la puerta.

 Sarada solo se reía, ella tuvo razón, su hijo era un pequeño Boruto, era exactamente igual que él excepto por sus ojos jade. Hasta su carácter era similar. Siempre montaban el mismo espectáculo a la hora de bañarse, cosa que ya pilló por costumbre en el cómico hogar.  

-¿Qué ha pasado ahora?- Sarada se reía con la expresión de Boruto, este se encontraba solo con su pantalón, mientras que su hijo iba aún desnudo.

-Tu hijo, ha sacado el carácter de tu padre.- Si claro, como si ese no fuera  el mismo carácter del rubio.

-Voy a hacer como si no he escuchado eso.-Se agachó a la altura del pequeño niño de apenas cinco años recién cumplidos.- Kyouske cariño, yo ya me he bañado hoy, báñate con el tonto de tu padre por hoy mientras hago la cena, hazlo por mamá.- El niño puso un tierno puchero, pero aun así asintió.

-¿Por qué a ti siempre te hace caso?- Cuestionó Boruto mientras el pequeño ojijade se adentraba nuevamente al cuarto de baño.

-Porque a mí me quiere más.- Se burló mostrándole la lengua a su marido.

-Que graciosa.-Antes de meterse al baño, besó a la pelinegra, obteniendo un gritito desde la entrada.

-¡Eso no es justo!¿Por qué estas besando a mamá?- Un enfadado Kyouske le gritó a su padre.

-Porque es mi esposa- 

-Pero seguro que te deja cuando le diga de casarse conmigo.- El niño sabía a lo que iba mientras se señalaba  a sí mismo. Boruto estaba atónito a lo que escuchaba.

-No te puedes casar con tu madre, ya está casada conmigo y no me va a dejar.- Agarró a su hijo de la cintura levantándolo del suelo  mientras este pataleaba contra su cuerpo. Se lo llevó de nuevo al baño con poco esfuerzo.-Además ¿A ti no te gustaba Kyoka?- El pequeño se volvió un pequeño tomate andante.

-Eso no es verdad.- Puso un puchero, Desde luego, la hija de Mitsuki y Chouchou definitivamente era la chica que le gustaba a su hijo. Aunque tendría que seguir vigilándolo de cerca por si acaso.

Lanzó a su hijo a la gran bañera llena de espuma por los movimientos del pequeño, quién empezó a jugar con unas figuras de unos ninjas , regalo por parte de su abuelo.

________________________

Después de su larga y cómica cena, los adultos discutían sobre quien dormiría al pequeño revoltoso.

-Acuesta tu a Kyouske, yo limpiare los platos.- Sarada recogía la mesa mientras hablaba, A su hijo no parecio gustarle la idea ya que contestó muy rapidamente.

-Mamá eso no, yo tengo que dormir contigo y papá puede dormir solito.- Boruto no le creía a su hijo. ¿Esa era su competencia? No aún más importante ¿Tenía competencia aun cuando ya estaban casados? Porque sí, se ve que su hijo tiene todas las intenciones de arrebatarle a su mujer. Y eso hacía reír a carcajadas a Sarada.

-Mejor ya recojo yo la mesa, los dos sabemos quién va a acabar durmiendo a este mocoso.- boruto se levantó arrebatándole los platos a la pelinegra quien soló sonrió inocente, como casi cada día y acompañó a su hijo hasta la habitación.

Cuando Boruto acabó de recoger todo, volvió a su habitación, dónde ya estaba su esposa recostada.  

-Se durmió como un tronco a los pocos minutos.- Le informaba.

-¿Por qué me odia tanto mi propio hijo?-Boruto, con su ropa para dormir, se recostó abrazando a su esposa, quien solo se dejaba hacer.

-Si Kyouske te quiere un montón, solo que es igual de cabezota que tú en esos temas.- Bostezó- La verdadera pregunta no es esa ¿Por qué nuestros hijos se parecen tanto a ti?- Ahora fue turno del rubio para reír.- No estoy bromeando.-

-Yo que sé, dile a mis genes, será que los hice demasiado bien.-Ahora sarada se sonrojó, por cinco años que estuvieran juntos, las expresiones de la pelinegra eran siempre las mismas.

-¿No quieres otro?- La cabeza de Boruto que se encontraba en el pecho de su esposa por estar siendo abrazado, se elevó dirigiendo su vista hacia sus ojos.-No digo que sea ahora, pero tener otro hijo estaría bien.- Boruto sonrió.

-Me parece una estupenda idea, una niña igual a ti esta vez sería perfecta.- La beso provocándole una no tan sutil risita a Sarada, definitivamente si tenía otra hija sería la segunda princesita de papá.-¿Cuándo lo quieres? Ahora mismo, o el año que viene.- LA mano de su esposo se coló por su camiseta rozándole el vientre ahora plano de esta.

-Creo que el año que viene sería perfecto ¿Pero hay que practicar el proceso por si nos hemos olvidado?¿Te parece?- sarada quien se volvía un tanto más atrevida y confiada a solas con su marido, empezó a besarlo profundamente mezclando sus lenguas y acariciando los brazos de este. Mientras el rubio solo acariciaba la espalda de su esposa.

-Me Parece una estupenda idea.-

_______________

En menos de cuatro meses, la familia Uzumaki-Uchiha ya esperaba un nuevo miembro, una niña pelinegra de ojos blancos que nacería meses más tarde, la cual sería bienvenida con los brazos abiertos por todos.

FIN