Capitulo 2| Snow Falls.

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Pocas horas después por la mañana, ambas chicas se encontraban empacando sus cosas, las más esenciales, claro está que no se llevarían todo su departamento.

Aunque obedecieran a su tío, ganas no les faltaban de solamente ignorar sus órdenes y hacer lo que se les diera en gana como en algunas otras ocasiones. Pero en algo no obedecerían a su tío, eso sería darle mucho gusto, no se irían en tren como les ordeno, sino que irían en su auto. Más en esta ocasión tratarían de darle solo un poco de satisfacción para su enorme ego, y eso se debía al recordar su mirada de decepción y cansancio que se cargaba, él solo tenía esa expresión cuando pensaba que ya no tenía lucha con ellas. Siempre habían tenido esa actitud rebelde y revolucionaria, pero la más impulsiva y desobediente era Maze, de verdad que ella era la peor de ambas hermanas.

- No sé porque lo estamos obedeciendo, digo... muchas veces no lo hemos hecho -Maze mira a su hermana en busca de sus típicas respuestas lógicas-, Tenía esa mirada, ¿Verdad? Esa que dice que ya está harto y que nos quiere lo más lejos de él por un largo tiempo.

- Y no lo culpo, Maze. Hemos estado haciendo lo que nos da en gana y con métodos poco ortodoxos -argumenta.

- Pues, ¿sabes qué? Yo sí que lo culpo, no olvides que gracias a él estamos aquí, ¿acaso se te olvido que nuestro sueño no era nada similar a ser detectives, y vivir en esta asquerosa ciudad?

Por unos instantes Arya se queda en silencio, volteando la mirada. Por supuesto que no lo olvidaba, pero tampoco estaba de acuerdo con su hermana mayor. Si, no tuvieron una buena infancia y eso hacia estragos negativos en su vida. Si, su tío podía ser cruel en ocasiones, pero entendía que por su carácter lo hacían rabiar. Y si, entendía que sus sueños fueron aplastados por la inmensa bota de su tio Gabriel, como si solamente pensara en él mismo, pero lo cierto era que solo buscaba protegerlas; que fuesen valientes y nunca se dejasen pisotear por alguien más... lamentablemente Maze no veía los actos de Gabriel de la misma forma que Arya lo hacía.

- Olvidemos esto y solamente hagamos lo que nos pide, después tú y yo nos largaremos de ese pueblo aburrido, de esta ciudad y haremos lo que nosotras deseamos, ¿Qué opinas de eso? -Arya sonrío, siempre sabía que decir para hacer sentir bien a su hermana.

- Opino que lo hagamos, juntas -tomo sus maletas ya listas y, dando un último vistazo a su departamento; salieron pensando en que tal vez esa investigación quizás solo sería el principio de muchos grandes problemas. Ambas lo sentían, pero ninguna dijo nada.

* * *

En el auto sonaba la canción "Dark Times" de The Weeknd y Ed Sheran. Las ventanas estaban cerradas por el frío que hacía, si en la ciudad hacia frío, en los pueblos mucho más. Arya estaba al volante esta vez, ya que su hermana anteriormente había conducido por una hora.

Maze se revolvía incómoda en el asiento y no paraba de beber agua, se sentía extrañamente deshidratada y algo ansiosa, además de su respiración agitada. Entonces, por fin Arya se hartó de su actitud y golpeo rápidamente su brazo.

- ¿Podrías controlarte un momento? -pidió mientras volvía su vista al camino frente a ella.

La neblina era espesa, apenas se alcanzaba a ver el solitario camino con sus árboles y montañas por doquier. El frio se colaba por las ventilas del auto, aunque la calefacción estaba encendida, últimamente ese cacharro estaba fallando mucho.

- No me pidas eso, sabes que no me gusta estar mucho tiempo encerrada en un mismo lugar -y para ella: que sea pequeño y frígido lo hace mucho peor, eso le genera recuerdos poco agradables.

- Tranquila, faltan 15 minutos para llegar... ya casi -se susurraba a sí misma, tratando de calmarse y así mismo lo hiciera Maze.

Repentinamente, se escuchó una pequeña explosión, como si una llanta hubiese reventado, y lo hizo. Causando que el auto se saliese de control y del mismo camino, yendo a dar contra algunos arbustos y árboles.

𝗦𝗼𝗯𝗿𝗲 𝗟𝗼𝘀 𝗖𝗮𝗱𝗮́𝘃𝗲𝗿𝗲𝘀 ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora