FLEUR FANÉE

Capítulo 3

Día lunes, seis cuarenta y cinco de la mañana y yo estoy buscando mi bendito zapato por todos lados pero no logro encontrarlo, salgo corriendo de mi habitación hacia la de mi compañera pero me quedo rígida al ver a Nimer en el salón. Yo aún estoy con mi falda de uniforme pero en la parte superior solo llevo mi sostén de encaje rojo que al contraste con mi piel blanca resalta el doble, llevo mi cabello lacio castaño suelto, y un zapato puesto.

—Vaya, este es un gran día. — dice con una sonrisa pícara en el rostro.

—¡Oye! No me veas. — digo intentando cubrir mi cuerpo con mis manos. — en todo caso, ¿qué haces aquí tan temprano?.

—Yo no tengo culpa de que estés tan buena. — y en mi mente lo estoy maldiciendo mil veces. — respondiendo a tu pregunta, tu amiga me pidió pasar por ustedes antes de ir al trabajo, ella me abrió la puerta.

—Hija de perra, no me dice nada. — murmuró para mi.

Retroceso y vuelvo a mi recámara, coloco una camisa blanca sin mangas y luego mi camiseta de uniforme. Para cuando vuelvo a buscar mi zapato esté esta en las manos de Nimer quien se tomó la tarea de buscar por mi.

—Podrías… por favor darme mi zapato. — pido intentado ser amable, a esta hora mi paciencia es nula y ya es súper tarde.

—Podría si, pero, y si no quiero. — y ese tono burlón aparece de nuevo.
—Hurensohn  (hijo de puta en alemán), dame eso o te voy a golpear y créeme no te gustará. —sentenció.

—Sin insultos muñeca, muy linda pero con la boca muy sucia. — dice moviendo la cabeza de un lado a otro en desacuerdo. — además, no de atreverías a golpear un hermano Eloy ¿o si?.

—Touché scheisskerl (bastardo), pero ya! Enserio necesito mi zapato para poder irnos ya es tarde. — pido y me lo arroja, lo esquivó y le muestro el dedo del medio. — esta me la debes.

—Isti mi li dibis. — imita mi tono de vos y pone los ojos en blanco.

Cuando bajamos del auto de Nimer como cada vez muchas perras nos ven raro pues porque es un Bentley continental GT descapotable, parece recién salido del concesionario, pero para un tipo con tanto dinero con él no es nada y a mi no me interesa mucho a decir verdad. Eloy va delante cuando nos encaminamos a la entrada para despedirnos y yo no me quedo con nada, sin esperarlo doy la vuelta y coloco mi pie frente al suyo y con  un movimiento rápido esta en el piso.

—¡Uy guapo! ¿Te dolió?.— pregunto con cara de inocencia.

—Al principio si, pero con las vistas que me estas dando hoy no me quejo. — dice y me doy cuenta que estoy utilizando la falda más corta que tengo, intento darle una patada pero reacciona rápido y la esquiva. — con esta no me quedo mi amor, ten cuidado.

  y con eso se va, mientras Aisha que hasta el momento estuvo como espectadora estalla en risas.

—Ustedes tienen una relación demasiado extrema de amistad.

—Es más puro y sincero que hay. — le digo.

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En el receso me encuentro con Aisha en el pasillo que va hacia el campo de fútbol, están entrando y no puedo evitar mirar el bombonazo de fuego que es mi chush Aarón Eloy, es un muñeco divino y capitán del equipo, lo se, muy cliché pero es todo un Adonis, esos ojos azules tan transparente que me roban suspiros y esos labios rojos carnosos hacen que su cara parezca tallada por los mismos ángeles, estatura de uno punto noventa y un cuerpo muy bien trabajado me tienen loca, para finalizar unos hoyuelos a cada lado de sus mejillas, un infarto de hombre que ni en otra vida conseguiría.

Aisha me saca de mis pensamientos con un golpe en mis costillas.

—Despierta bella durmiente que se te sale la baba. — yo giro para enfrentarla y la encuentro riendo.

—Oye! Déjame vivir mi sueño frustrado.

—¡Esta mirándote! – exclama Aisha.

—Claro que no, estás delirando.

—Maldita loca, ¡te digo que si! Mira— me anima girando mi cuerpo un poco para poder ver.

—Cre-creo que si es a mi, O por Dios ¿que hago?.

—¡Salúdalo!.

—¡Queee! ¿Estas loca? Claro que no.

—Si no lo haces tú, lo haré yo y créeme muñeca no te va a gustar.

—No te atreverías, perra.

—Meybi llevas tres años viéndolo desde las sobras, no crees que ya sea hora de tu historia de amor?.

—Eso solo pasa en las películas  y los libros Aisha, para una chica como yo no hay nada de esa mierda de cliché donde el chico guapo y sexi  se enamora de mi. — confieso cabizbaja.

—No pierdas la fe en todo solo por una persona Meybi porfa, inténtalo tú eres hermosa, puedes conquistar a quien tu quieras.

—Yo lo quiero a él, siempre fue así pero solo es una ilusión más. Vamos a clase, se hace tarde.

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Luego de una larga jordana de clase por fin es la hora de la salida y Aisha me espera afuera con Nimer quien solo ha tenido media jornada en la compañía de su padre por lo que parece.

Me encaminó al estacionamiento del instituto y cuando logré divisar a mis amigos notó que Nimer trae un balón de fútbol en la mano, conociéndolo bien se lo que está pensando y doy la vuelta enseguida comenzando a correr pero es demasiado tarde y siento un golpe seco en mi brazo izquierdo que hace que pierda el balance y caiga sobre mi estómago perdiendo todo el aire de mis pulmones y recibiendo una ráfaga en otras partes que me percata de mi culo expuesto ante todos los del estacionamiento.

Escucho pasos apresurados hacia mi, y en menos de un segundo estoy de pie y rodeada por dos fuertes brazos.

Esto no me puede estar pasando a mi. Es lo que mi mente logra articular.

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Nota de autoras:

Aquí esta el nuevo capítulo para ustedes...

Estamos muy agradecidas porque se toman el tiempo para leernos, los queremos muchísimo y esperamos les guste.

Estela: esto recién comienza pero se poner cada vez mejor. ¿te parece muy cliché, Viviana?.

Viviana: demaciado para mi gusto cariño.

Estela: perfecto bitch eso es lo que quiero....por ahora 🙃

Viviana: no se olviden dejar su voto y comentario de los que les pareció.

Un beso y un abrazo de las chicas desastrosas.

E'R y V'E