𝟓.-𝒄𝒖𝒆𝒔𝒕𝒊𝒐𝒏𝒂𝒏𝒅𝒐 𝒂𝒍 𝒄𝒐𝒓𝒂𝒛𝒐́𝒏.

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¿Es cuestionable lo que el corazón te pide que hagas?

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¿Es cuestionable lo que el corazón te pide que hagas?

 Porque si es así he de cuestionar lo que mi consciencia susurra pero el corazón pide a gritos que haga. Antes de pensar en mí, lo estoy haciendo por ti, una simple desconocida que volvió mi mente un vuelco de emociones superiores a las que siento por no saber quién soy, una persona a quien puedo cambiarle el destino porque recuerdo su pasado, alguien a quien puedo salvarle la vida, aun cuando por dentro estoy más muerta que viva.

Con una incipiente melancolía, mi figura descansaba sobre la arena, completamente tendida sobre ella, con la vista fija en el cielo, notando como aquellos fulgidos destellos de tonalidad carmesí dan el despido al día y la bienvenida a la noche. Era un punto medio, en el que la maravilla de la naturaleza te dejaba te dejaba apreciar la sencilla forma de conectar polos opuestos; era un punto medio en donde estaba, en donde la conciencia me incitaba a tener un pequeño destello de mi pasado, para erradicar este agobiante presente, por otro lado estaba ella, la chica de mis sueños, la víctima de aquel accidente, aquella que logré conocer cuando perdió su vida, ¿es acaso una prueba del destino? Para saber, si soy capaz de salvar la vida del protagonista de mis sueños o salvar mi vida misma.

Aun cuando en inevitable penumbra, salvar la vida de aquella chica intentaba, pero cada que una nueva oportunidad se presentaba ante mí, no la podía aprovechar, corría hasta ella, siempre aparecía en el mismo lugar y me era imposible. La calma y la paciencia en mi estaban en constante ausencia, la desesperación en cambio perjudicaba mi pensar, en el que ahora, más de una vez solía ver la misma muerte.

Cuando el reloj marcó cinco minutos, sabía, que por más que quisiera, no podía salvar ninguna de las vidas que tanto lo merecen, así que di el último viaje, en el que como siempre, la chica giraba en aquella curva, en la que ni el más desgarrador grito, la podía salvar. Por una vez más, su muerte me fue imposible de impedir, aquella muerte conformaría el peso en mi conciencia que no lograré borrar.

Cuando el tiempo estuvo por culminar, a su paradero corrí sin pensar, tomé su cuerpo entre mis brazos y un casi inaudible "lo siento" fue mi despedida.

Cuando volví no me sentía como antes, la noche había terminado por caer y con ella, las esperanzas de hacer algo por quien me ayudó a recordar lo poco que reposa en mi consciencia.

Me iré de rodillas sobre la arena, temblando, con mis frías manos cubiertas de sangre, sosteniendo débilmente el reloj que cualquiera que si tuviera memoria, agradecería por tener. Solo quedaban tres minutos, ¿qué podría hacer en tan poco tiempo?

Tan siquiera una imagen del pasado volvió a mi mente en esos días, ¿y si su conexión conmigo era la de recordarme mi vida?, entonces, si no conseguí salvar su vida, es evidente que la mía tampoco, porque ella no sería una simple desconocida, ella era mi vida, mi consciencia, era yo.

—¡Perdóname!—grité al mar entre lágrimas—si de verdad contabas conmigo para salvar tu vida, perdón si era yo tu salida y perdón, por matar mis recuerdos.

Coloqué mi vista sobre el mar, aquel espeso y profundo cuerpo de agua, que reflejaba la tenue luz de la luna en conjunto a los miles de brillos celestes que me hacían recordar su mirada.

El mar de veía bien, tanto como para reposar en sus tibias y lívidas aguas, recordé que mamá me había contado alguna vez, lo feliz que lucía nadando en él, pese a ser mala haciéndolo. Pero desde que perdí toda pizca de felicidad tan solo me limitaba a sentarme a orillas del mar para contemplar sus aguas.

Fue cuando pensé:¿por qué necesito cohibirme de lo poco que recuerdo sobre ser feliz?, mamá dice que amaba nadar, por qué ya no lo hago?, Jennie solía decir que me sentía como un alma libre cuando corría a orillas de las olas, cuando el sol estaba por ponerse, ¿por qué jamás lo intenté de nuevo?, pero por sobre todo, si era ella, quien me hacía esbozar verdaderas sonrisas, ¿por qué no la recuerdo?.

Pronto, me di cuenta de que la única usurpadora de mi felicidad he sido yo misma, que me he fijado tanto en el pasado, que he dejado al presente atrás.

De tanto pensar en mí, no sabía quién era.

Aun estando débil, fui capaz de correr hacia aquellas aguas, en donde me sumergí sin pensarlo, en donde me di cuenta que sin necesidad de recordar lo feliz que me hacía ayer, me hace sonreír hoy, pese a todo, y en donde un mal movimiento me hizo tragar un poco de agua, pero jamás pensé que una simple sensación de ahogo, te haría ver más que un espacio borroso.

Aun estando débil, fui capaz de correr hacia aquellas aguas, en donde me sumergí sin pensarlo, en donde me di cuenta que sin necesidad de recordar lo feliz que me hacía ayer, me hace sonreír hoy, pese a todo, y en donde un mal movimiento me hizo t...

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(🃏)𝐘𝐔𝐀𝐍𝐅𝐄𝐍 ║ 𝖢𝖧𝖠𝖤𝖲𝖮𝖮.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora