CAPÍTULO 37

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ANASTASIA GREY

Es un cálido día en Seattle, perfecto para estar en casa y leer un buen libro pero no, en este instante me encuentro sentada en el asiento trasero de un lujoso Audi en la compañía del intachable y honorable Christian Grey, mientras que Taylor va al volante y otro Audi nos persigue con no se cuántos hombres encargados de nuestra seguridad o más bien la de Christian; el punto de todo esto es que vamos a un almuerzo en casa de sus padres, esto es una tradición para los Grey, un almuerzo familiar todos los domingos, algo que a mi infiel y falso esposo le molesta demasiado.
Al llegar a casa de los señores Grey nos recibe Rachel, una de las tantas empleadas que trabaja para los Grey, quien no es inmune al encanto de Christian.

-Buenas tardes señor y señora Grey, los están esperando en el jardín.
*Gracias. Contestamos Christian y yo al unísono.

Al llegar al jardín visualizo a los señores Grey hablar con un hombre, alto, fornido, cabello negro, y luce casi de la misma edad que el señor Grey.... un momento, acaso ese hombre.....  ay por Dios esto no me puede estar pasando a mí, ese hombre es mi mayor pesadilla, siento que esta vez me comienza a faltar el aire.
Después de muchos años estamos frente a frente y el muy maldito aún logra asustarme tanto o más que antes. Su cara al verme es de deseo reconozco muy bien esa mirada de lujuria aunque también luce muy sorprendido.
Christian rompe el silencio y comienza a saludar a sus padres y yo lo imito.

•Ana, te presento a un amigo de la familia.
-Un muy buen amigo... Replica Carrick
Él es Martin Anderson, Martin ella es mi esposa Anastasia Grey.
*Un escalofrío invade todo mi cuerpo... El muy maldito me inspecciona de pies a cabeza, y sé que la noticia no le agradó en lo absoluto. Este hombre me provoca náuseas y un profundo miedo pero no sé si estoy delirando de los nervios o estoy volviéndome loca pero al lado de Christian no me siento tan frágil, creo que Christian no permitirá que me haga daño o si ?

-Es todo un placer conocerla señora Grey. Dice Martin mientras me extiende su mano.
*Idiota es lo único que mi cerebro puede pensar sobre este hombre, respiro profundamente y con todo mi cuerpo temblando y al borde de un colapso le extiendo la mano y logro articular un "Lo mismo digo señor Anderson"
Mientras el posa sus asquerosos y repugnantes labios sobre el dorso de mi mano, acto que inmediatamente me traslada al pasado cuando él pasaba su asquerosa lengua por todo mi cuerpo obligándome a gemir para él, lo recuerdo como si lo hubiese hecho ayer !

-Tienes una esposa muy bella Christian apuesto que eres el hombre más envidiado de Seattle.
•Gracias Martin, sé que mi esposa es una mujer muy hermosa.

*Todo esto me han provocado unas terribles ganas de vomitar y por supuesto de salir corriendo de esta casa, me siento acorralada este hombre me esta desvistiendo con la mirada y sé que esa mirada significa que desea hacerme lo mismo, mi corazón se quiebra en mil pedazos y mi cuerpo sigue temblando, no lo puedo permitir!

-Bueno ahora que ya estamos todos, podemos almorzar, dice Grace.

*El almuerzo transcurre entre plática y plática logró darme cuenta que Martin es muy amigo de la familia Grey y ellos lo aprecian mucho sin embargo desconocen su pasado y lo poco hombre que es.

-Christian cuéntame cuánto tiempo llevas de casado?
•Sólo un par de meses Anderson.
-Es decir que todavía siguen de luna de miel.
*Christian dirige su mirada hacía mí y esboza una sonrisa
•Con una mujer así de hermosa e inteligente, no importa cuánto tiempo lleves de casado, siempre será como vivir una luna de miel.
-Vaya ! Realmente te enamoraste Christian.
•Así es Anderson de lo contrario no estuviera casado.
-Se conocen desde hace mucho tiempo? Digo conoces a su familia, sus gustos, miedos, sueños?

*Esto comienza a alterarme, solo escuchó voces, Martin haciendo muchas preguntas y Christian respondiendo cada una de ellas, no sé a dónde quiere llegar, pero realmente debo salir de aquí.

*Permiso, ya regreso......
Salgo prácticamente huyendo del jardín, entro a la casa y voy por un vaso de agua fría, trató de controlarme no quiero terminar nuevamente en un hospital.

-Sin duda alguna eres más bella de como te imaginaba en mis sueños, no he podido olvidarte mi bella Ana.
*No te acerques a mí Martin. Trató de sonar firme pero falló en el intento mi voz se escucha temblorosa, mientras este hombre se acerca cada vez más.
-Tú no puedes decir nada de lo nuestro Anastasia, ellos no te creerían y mucho menos Christian lo conozco como la palma de mi mano.
*Tienes miedo de que la familia Grey se entere de que el señor Martin Anderson es un hombre tan miserable y enfermo, tanto que abusaba de una menor.
-Tu dices una sola palabra y juro que te haré recordar los viejos tiempos. Aunque me gustaría recordarlos y si tu no obedeces cosas malas podrían pasarte, además no creo que a tu esposo le agrede la idea de estar casado con una mujer que está sucia y llena de secretos.
*Mi corazón late muy deprisa, este hombre me tiene acorralada entre sus brazos, tengo mucho miedo, estoy temblando tanto que ya no sé en que momento he dejado caer el vaso, derramándose el agua y el vaso haciéndose mil pedazos.

-Señora Grey está usted bien?
*Taylor llega a la cocina y Martin me suelta inmediatamente, no sé si Taylor alcanzó a ver o escuchar algo, solo esto me faltaba.
Si Taylor, estoy bien
-No lo parece señora Grey, está usted muy pálida iré a decirle al señor.
*No digo rápidamente, me podrías traer un vaso de agua por favor.
-Si señora

*En el momento que Taylor regresa con el vaso con agua, Christian también entra seguidamente de su familia.

•Amor estás bien ?
*Me ha llamado amor ? Este hombre debería recibir un premio por saber actuar tan bien !
Si, estoy bien, no es nada.
•Estás muy pálida; mamá puedes revisarla por favor.

-Por supuesto cariño.

*Luego de que Grace tomará mis signos vitales llegó a la conclusión que mi presión arterial estaba un poco baja.

•Mamá que tiene Ana?
-Solo fue un bajón en su presión arterial hijo.
•Debemos preocuparnos?
-Vamos a estarla chequeándola por unos días, de lo contrario no hay nada porque asustarse hijo.
Es mejor que la lleves a casa para que pueda descansar.
•Está bien.

•Está bien

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