Hoy es el aniversario de la muerte, de María, me despierto, Lía no está en la cama, bajo abajo y está con Marco, que le enseña fotos de María, en un álbum. - Lía: bela. - Marco: si mi amor, la abuela. - Lía: papá. Dice señalando una foto de Marco, de más pequeño, sonrió tiernamente, Marco me dice que está tarde quieren ir al cementerio, asiento con la cabeza. Gilberto y Igor aparecen por la puerta, después de desayunar todos juntos nos vamos a dar un paseo, por Mallorca, los chicos se emocionan contándonos, las anécdotas con María aquí, abrazo a Marco por instinto, el sonríe y me da un beso en la cabeza. Volvemos ya que empieza hacer frío, cuando llegamos a casa Lía está dormida, Marco la coge en brazos, la deja en su pecho. Entre Igor y yo hacemos comida holandesa, en honor a María, comemos, en silencio tras comer, visto a Lía abrigada para ir al cementerio
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Esta preciosa, Marco la coge en brazos y nos vamos a ver a María, miramos aquella tumba, donde pone su nombre, empezamos a llorar - Lía: bela. - Marco: si mi amor, es la bela. Lía le tira un beso, todos morimos de ternura, me quedo un rato allí, cuando ellos se van, empiezo a llorar, miro la tumba de María, pidiéndole ayuda con Marco, se que lo hice mal, pero estos días me estoy dando cuenta que lo necesito más que nunca, me limpio las lágrimas, vuelvo a casa de Gilberto y allí están con Lía intentando que camine, ella pasa de todo, se ríe de ellos. - yo: Lía cariño. - Lía: mamá. Lía sonríe y gateando viene a mi, mañana volvemos a Madrid, ya que el día 3 y el día 9 juega la roja. Marco tiene muchas ganas de jugar, de nuevo, después de estas largas vacaciones se tienen que concentrar todos los convocados. Lía ya tiene su equipación, preparamos maletas y un montón de cosas para cuando tengamos que ir al aeropuerto, Marco me ayuda con las cosas de Lía. - Marco: echaré de menos Mallorca. - yo: y yo también, me encanta este lugar me siento en mi segunda casa. Marco sonríe, después de recoger todo nos vamos a dar un paseo por Mallorca, donde están los amigos de Marco, con sus parejas, los saludamos y Lía pasa de brazo en brazo entre risas y palmotadas que les da hay este trasto de niña Pasamos el rato hablando de Lía, riéndonos con cada cosa y todos intentando que ande, pero la niña pasa de todos. Cuando volvemos a casa, Marco me pide dormir con nosotras, le digo que si, subimos y ponemos el pijama a Lía, me pongo a darle el pecho, mientras Marco se pone el pijama, la pongo en medio de los dos, Marco se acuesta junto a Lía, nos mira sonriendo, esa noche no duermo solo hago mirar a Marco y mi niña
