Oscura Pasión

❌En Mil Pedazos❌Capítulo 17

Danna

Era obvio, me encontraba en un mal momento, o quizás, un terrible sueño, solo quería que se detuviera, que al despertar, todo estuviera como antes. Pero, no era así, abrí mis ojos lentamente y lo que pude ver era el rostro de papá.

-¡Papá!.-exclamé, con un poquito de adormecimiento.

-¡Si!, tranquila estoy aquí.

Traté de levantarme pero me encontraba aún lo suficientemente mareada como para hacerlo.

-Cariño, no trates de levantarte, tranquila...

Una lágrima se deslizó por mis mejillas, y pude percibí mi triste realidad, aquella donde era infeliz.

-Todo pasó hija, todo ya paso.-trató de calmarme mi padre, su cabello estaba un poco canoso y su corbata fuera de lugar,-estaba muy preocupado-musitó, dándome un beso en la frente.

-Nada está bien papá... Nada... No podré ser madre.

-Hija hay medios para hacer mamá, inseminación artificial, tratamiento o que se yo.

-No es el hecho papá, me casé con Cole porque estaba embarazada. Ahora, no puedo ni darle un hijo.

-Estoy seguro que Cole lo entenderá.

-¿Y yo?, ¿Mis sentimientos?, ¿el deseo de ser madre?.

-Todavía eres lo suficientemente joven Danna.

Bajé la mirada y las lágrimas fueron constantes...

-Soy un caso perdido papá, soy una fracasada.

-No digas eso Danna.

-Es cierto papá.-susurré estallando en llanto.

-Shh, Danna mírame, mírame.-bufó, tomándome por las mejillas, -Tu madre te ama, yo te amo, Kudrent te ama, Miguel, Laurent te aprecia, esa chica Maddison te quiere, y estoy seguro que Cole te ama. -Hizo una pausa y secó mis lágrimas,-Linda, no lo puedes ver porque estas dolida, pero el amor esta visible ante tus ojos, solo que ahorita no lo puedes apreciar.

Asentí, con dolor en mi corazón.

-Hija, creo que... deberías de asistir a un psicólogo,-soltó de repente.

-¡Que!.

-Trabajar un poco más en tu autoestima, seguridad, relaciones interpersonales, que se yo.

-No necesito ayuda papá.

-Yo creo que sí. Y el primer paso para solucionar tus problemas es aceptando tus errores cariño.

Parpadeé un par de veces, sentí que mi cerebro se congelaba. Quizás mi competencia con Kudrent fue a causa de mi baja autoestima e inseguridades. ¿Cómo dos hermanas nacidas en un mismo vientre pueden ser tan diferentes?. Kudrent era hermosa, segura, sexy, sociable, divertida, extrovertida, espontanea, capaz de tirarse a medio mundo si lo desea, en cambio, mi comportamiento es totalmente opuesto a el de ella. No puedo ser sexy sin reprocharme a que me parezca una zorra, ni segura sin dudar de mi misma en todo momento.

-¡HIJA!-escuché decir... Se abrió la puerta y mi madre se lanzó a abrazarme...

-Danna, por dios, estuve muy preocupada.

-Estoy bien mamá.-solté con frialdad.

-Esta lastimada... cariño siento lo del bebé.

-Más lo siento yo mamá.

Mi madre miró a mi padre, con una mirada fría, llena de rabia. Taconeó y carraspeó un par de veces para emplearle un saludo.

-¡Hola!.