Capítulo IV

978 58 13
                                    

-Mmm... Bueno. Quería pedir disculpas, sé que ya te lo dije pero ahm... Eso estaba planeado. Anoche Charlie habló conmigo, me hizo reconsiderar cómo te había tratado a tí y a tú amiga, yo sólo no... No puedo controlarme. Espero... Que... Ya sabes... Puedas olvidar esto...
-No necesitas decir más, en serio. Todo está bien. ¿Sabes? Todo el día de ayer estuve...
-¿Enojada conmigo? Ya me disculpé, no sé que otra cosa quieres que diga, tal vez no fue una buena idea venir...
-¡ESTUVE PENSANDO EN TÍ!
-¿QUÉ? No entiendo, ¿Cómo que pensando en mi?
-Sí, desde que te ví por primera vez no pude sacarte de mi cabeza. Esta vez me disculpo yo por decir esto tan repentinamente, no puedo controlarlo, es como si... Hubiera estado ahí desde siempre.

Esas palabras lo impactaron, no reaccionó inmediatamente. Se limitó a decir: "No entiendo por qué me dices esto, ni siquiera me conoces, no tienes idea de quién soy, mejor aléjate de mi". Entonces, como impulso me abalancé sobre él, intenté besarlo y se quedó paralizado.
-Es mejor que me vaya, piensa mejor lo que haces.
-¿Se lo dirás a alguien? Lo siento, no sé qué pasó, fue el momento y pensé que corresponderías.
Ya cuando abría la puerta, se detuvo y dijo:
-No puedo estar con nadie, la única cosa que amo más que a mí mismo es mi fábrica y mis chocolates, son lo que más me importa, si dejo entrar en mi vida a alguien es complicado... Hice lo que debía, buscar a un heredero. Charlie es un buen niño, pero sólo confío en él y en mis oompa loompas. No es por ofenderte, eres una chica... Y eso te hace linda, es simplemente que no puedo hacerlo. Tal vez no volvamos a vernos, pero cuentas conmigo y yo contigo.

Cerró la puerta y se fue deprisa. Me quedé sentada en el suelo, lloré un poco pero luego me recuperé. Dormí un rato, y de repente ignoré todo lo acontecido, como si no hubiera pasado. Willy Wonka... No existes para mí nunca más...

"Quien diría que el chocolate Wonka era tan amargo..."Donde viven las historias. Descúbrelo ahora