Sumergido de nuevo en estos brazos que me atrapan y golpean mi alma al mismo tiempo.
Me empujan hacia el abismo aún sabiendo que me tienen encadenado en sus muñecas.Bailo en aquel vaivén que plantaste en mí, aunque aveces tropiezo y caigo.
Ahora viendo borroso y poco conciente, quiero decirte lo que espero de tí, o al menos lo que no espero, pero sigo en lo mismo, esperando...
Bajo esta escasa luz, pienso en tí y quiero pedirte que aceptes ir hacia lo desconocido incondicionalmente.
Queriendo ser la ola que golpea la diminuta roca que cabe en tu pecho.