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Sintió que era un cobarde, huyo, salio corriendo de esa habitación como si hubiera visto un fantasma. Podría haber hecho algo, no sé, cualquier cosa. Pero no, se sentía diminuto ante la presencia de aquel hombre, se sentía aún más pequeño que la cabeza del Comisario Volkov. Como haría para verlo de nuevo a los ojos, todavía le debía una disculpa y un traje nuevo.
Se cruzó con Horacio en el pasillo y este al ver lo nervioso que Gustabo se encontraba se frenó para saber qué coño le pasaba a su hermano.
- ¿Te encuentras bien? – pregunto el de cresta preocupado.
- Si, solo acabo de pasar por una situación un tanto incomoda. – dijo agitado.
Horacio observo a su mejor amigo y pudo notar que tenía toda la ropa manchada.
-Vale, ¿la mancha en tu uniforme tiene algo que ver con esa situación incómoda? – volvió a interrogar al menor.
El rubio se miró y se dio cuenta que con todo lo que había ocurrido hace unos minutos atrás no se había cambiado de ropa.
-La madre que me pario. – dijo y miro a Horacio. –me cambio y vamos a realizar un 10-33 para contarte lo que paso. – suspiro.
Gustabo manejaba y le comentaba el pequeño accidente que había tenido con el Superintendente. Lo único que hizo Horacio fue abrir muy grande los ojos y levantar las cejas lo más alto que pudo. El de ojos claros sonreía y reía nervioso.
-Aun le debo un traje. – dijo preocupado.
-Vale vamos a ver cuánto un traje que usaría el abuelo. – exclamo Horacio. – no creo que haya problema, la ciudad está tranquila en este momento.
Estacionaron frente a una tienda de trajes muy lujosa, bajaron del Z y ambos se dieron el tiempo de observar con atención.
- ¿Serán suficientes mis ahorros como para pagar un traje de ese precio? Le pregunto a su amigo mientras observaban los escaparates de una lujosa tienda de trajes.
- Nop, pero te puedo prestar dinero. – propuso el de cresta al ver la cara de preocupación en Gustabo.
- No, no te preocupes Horacio, ya veo como me las apaño. – negó con una sonrisa en la cara.
El menor asintió y volvió la mirada hacia el escaparate. – que bien se vería una foto mía mostrando todo esto. – afirmo con una sonrisa en su rostro y las manos en la cadera, esa típica pose de héroe que lo caracterizaba.
- ¡Madre mía! – rió burlón Gustabo mientras le daba un pequeño empujón a su amigo para que volviera a la realidad.
- ¿Que? Interrogo el menor. – el último comercial que hice salió perfecto! – exclamo Horacio.
-Sí, lástima que nadie coma Doritos de limón. – dijo Gustabo mientras reía burlón.
- Yo si los cómo. – afirmo el menor.
- Solo porque tu cara apareció en el comercial, caranabo, además de que te han mandado tantos paquetes como para alimentar todo un continente. – expreso el de ojos claros.
Ya era medio día y se podía oír como sus estómagos hacían ruidos para avisar que necesitaban algo para comer.
- Hablando de comida, ¿Por qué no vamos a comer a McDonald's? – pregunto el menor. El cual recibió un rotundo no por parte del de los ojos claros.
- ¡no voy a comer ahí! Yo soy rial fut. – exclamo con ambas cejas levantadas.
Ambos estaban comenzando su horario de almuerzo así que decidieron comer en la casa del mayor. Se subieron a la patrulla y se dirigieron directamente a su lugar de destino. Lo único que Horacio consiguió fue lechuga y agua, pero no le preocupaba luego podría pedir algún almuerzo en la cafetería de la comisaria.
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Holi uwu
Primero que nada les quiero agradecer por esas 150 lecturas, nunca creí que llegaría ni a las 10 xD gracias gracias gracias de corazón 🅰️ bueno ya paro que lloro jajaj
Espero que este capitulo sea de su agrado TwT recuerden que recibo criticas ya que todavía estoy aprendiendo y no se que tal va toh esto xD
