El esposo de mi hermana - L.S [Adaptación]

2.-¿Qué es?

Harry miro a Louis con asco, no estaría con él mientras no tuviese un baño, estaba sudado.

Ambos tomaron lugar frente a frente en la mesa, por alguna extraña razón el ambiente se encontraba incómodo, un silencio que todo el mundo odiaba.
Las mujeres con el uniforme que indicaban que trabajaban haciendo la limpieza, comenzaron a poner los platos con comida a cada persona.

-Gemma- hablo Jay -después de comer me gustaría que fuéramos a ver lo de tu vestido, ya que tenemos la boda en unos cuantos días.

-Claro señora Toml...digo Jay- Gemma se sonrojo, no estaba acostumbrada a hablar de esa manera con una persona casi desconocida, pues antes de la muerte de sus padres, siempre escuchaba hablar de los señores Tomlinson y su hijo, pero nunca los había visto, hasta ese día.

-Soldado Harry, ¿estará presente el día de la boda?- pregunto el señor.

-Claro que estará- respondió de inmediato Gemma.

-Si no sale un asunto urgente estaré.

-Por cierto- hablo Louis- ¿Sabe cuándo se abrirá la convocatoria para entrar al ejército?

-¡Louis!- grito su padre.

Harry miro a Louis, un hombre débil como el joven que se encontraba al frente, no sobreviviría ni un día, pero le gustaría ver cómo lo intentaba.

-En unos cuantos días se abrirá la convocatoria- hablo Harry.

-Por favor, disculpe a mi hijo, desde que es un niño tiene ganas de entrar al ejército, le hemos dicho que es peligroso, pero no entiende- Jay se mostraba inquieta, odiaba pensar en su hijo tomando un arma y poniendo su vida en riesgo.

-Dejelo señora Tomlinson, si él quiere ayudar a su país, que así lo haga

-Bien dicho soldado, es más, ¿porque no entrena a Louis?- hablo el señor Tomlinson.

-No lo sé- Harry se iba a negar o al menos sacaría de excusa su trabajo para no hacerlo, no tenía tiempo para niños ingenuos.

-Se lo ruego señor- Louis había llamado su atención.

Harry no podía negarse a esos ojos azules, su expresión de niño arrogante y mimado lo hacía ver hermoso, o al menos eso pensaba Harry.

Gemma solo esperaba que su hermano no sé enojara con aquel muchacho que con solo verlo unos segundos, estaba segura que lo amaría y protegería a toda costa, sin importar lo que pasará en el futuro.

-Lo pensaré- respondió un tanto seco.

Los hermanos Styles se miraron, Gemma sabía perfectamente que esas palabras de -Lo pensaré- era que aceptaba, regálandole una sincera sonrisa a su prometido.
La comida transcurrió de una manera normal.

                                    *

-Este es el vestido.

Jay saco un vestido blanco, tan blanco como las nubes de los días soleados, como la nieve, la tela era de las más caras, de mangas largas y un corcel con pequeños toques brillosos, con un velo largo y hermoso.

Mientras Gemma cambiaba su vestido color vino por el de novia, Harry esperaba afuera de la habitación, recargado en la pared y cruzado de brazos como ya era costumbre, esperando a que le dieran la señal de que ya podía entrar, tenían que ver qué todo saldría perfecto, tal y como sus padres lo habían planeado.

Cerro sus ojos por un momento, tenía tanto que hacer, pero por alguna razón sus deberes pasaban en segundo plano, pero, ¿Qué era esa razón?, La imágen de un joven con piel aperlada, ojos azules, cabellos rebeldes y una sonrisa hermosa apareció en su mente, abrió los ojos de golpe, chocando la mirada con ese joven.

-¡Maldito mocoso!- trato de disimular.

-Lo siento señor, yo quisiera hablar sobre el entrenamiento.

-Te dije que lo pensaré.

-Por favor señor, le prometo que no le fallaré- por alguna razón se sentía indefenso y torpe.

El hombre con el uniforme verde oscuro del ejército, su rostro neutro y su postura, hacia que cualquiera bajara la mirada y sintiera miedo, pero Louis no, el estaba deseoso de estar a su lado, de combatir y tener cosas en común con ese hombre, pero el nerviosismo y inferioridad que sentía, hacía difícil el hablar, pero está era su oportunidad.

-Mañana a primera hora te quiero listo en el jardín de atrás, y no quiero nada de quejas.

Louis sonrió y casi salta del gusto- Gracias, en verdad gracias, vera que seré el mejor.

-Eso lo veremos niño.

-Ya pueden pasar- La madre de Louis se asomó, una sonrisa resaltaba en su cara.

Los dos hombres entraron a la habitación, Gemma estaba sonrojada, el vestido marcaba muy bien su silueta de mujer que aunque tenía 16 años, realmente estaba bien formada.

-Te ves muy linda- dijo Louis.

Gemma se sonrojo aún más y Harry sintió un hueco en el estómago, haciéndose preguntar, ¿Qué es esto que siento?, Ver a su hermana con su prometido le hacía enojar, no podía aceptar esa relación, que era?

Cerro su ojos aprentadolos para hacer desaparecer sus ideas, no podía pasar, el ya había estado casado y amaba a su esposa.
Una vez más los hombres cruzaron miradas, tal vez ni uno de los dos sabía que sucedía, pero de lo que si estaban seguros era que nada saldría bien de ahora en adelante.