Las aventuras de Tuqui y Fízgon

06

Según Fízgon tenían al menos dos horas caminando en linea recta, ya le estaban empezando a doler los pies, le empezaba a dar mucha sed y Tuqui no daba señales de terminar el recorrido.

Para Fízgon la comida o el agua no eran muy escenciales, el podía estar hasta 20 días sin ninguno de los dos, pero el ya llevaba 18 días sin probar bocado o agua y el estar caminando bajo el abrasador calor del sol en medio del desierto no ayudaba mucho.

No pudiendo más se dejó caer a la arena totalmente cansado, hambriento y sediento. De verdad no podía más, pero parecía que para Tuqui no era así.

-Tuqui, por favor, descansemos un rato, ya no puedo más- su voz salía muy baja y cansada.

Tuqui casi no lo escucho y se detuvo dándose vuelta y viendo que Fízgon estaba tirado en la arena.

-No escuché, ¿Qué me decías?

-Que descansemos un rato, ya no puedo más.

-Ah... Claro- y se sentó al lado de Fízgon, Tuqui agradecía mentalmente que Fízgon se detuviera, el también se estaba cansando, pero no quería decirlo, se estaba haciendo el fuerte.

-Ah!- Fízgon soltó un grito de frustración por lo abatido que se sentía -¿No tienes agua?

Tuqui se rascó un poco la cabeza y pronunció cansado y apenado -No, lo siento, para este tipo de viajes siempre traigo agua conmigo, pero por lo inesperado de la situación se me olvidó, estaba tan feliz de tener un nuevo amigo que se me olvidó completamente.

-No te preocupes, generalmente no me es muy necesaria el agua, pero ya estoy llegando a mi límite. Descansemos un rato y continuemos con nuestro camino.

Tampoco valía la pena regresar a dónde residía Tuqui, ya estaban a la mitad del camino y regresar les saldría peor.

-¿Cada cuánto haces éstos viajes? Y más importante ¿Cuánto nos falta de camino?

-Cada cuatro días y no te preocupes, nos falta la mitad del camión, aunque no lo creas no es mucho.

-¿La mitad del camino?

Tuqui asintió con la cabeza y el otro dejo salir un suspiro cansado y se resignó a pensar que todavía le faltaban dos horas de caminata.