Verdades Oscuras

Capítulo 1

Kim Yeji

Hoy fue un día demaciado agotador en el Instituto. Teníamos muchos exámenes y muchas tareas. Me puse mis gafas para leer y coji mi libro que estaba leyendo "Las lágrimas de Shiva". Un libro muy interesante que estaba en el puesto #15 entre mis 278 libros preferidos.

Caminé mientras leía y vigilando por donde pisaba. De repente un olor me llamo la atencion, era un aroma a pateles, chocolate.... era una tienda de dulces llamada "Sweet World" . Había todo tipo de dulces, se me hacía la boca agua sólo mirandolos des de el cristal, Imagínense cuando entrara. Entré.

- Buenas tardes pequeña. -una agradable anciana de ojos azul marino y con un vestido corto del mismo color, me sonrió.

"Demaciado hermosa"

- Buenas tardes señora. -le regale una sonrisa.

Empecé a dar vueltas en mi lugar mientras contemplaba y apreciaba esos deliciosos dulces que me estaban rodeando. Me fijé en un pequeño pastel, era un "Red Velvet" y allí me acordé.

"A Jennie le gusta el "Red Velvet" y no le regale nada por su cumpleaños de hace 5 día"

Me acerqué a la señora.

- ¿Cual te llevarás? -me preguntó agachandose mientras apollaba sus suaves y finas manos en mis hobros.

- ¡Ese! -le señale el pastelito.

- Buena decisión -dijo mientras ponía el pastel en un caja de cartón que tenía el logo de "Sweet World" en el medio -Parece que tienes un buen gusto para los pastelitos -prosigio extendiéndose la caja.

- En verdad no es para mi, es para mi hermana mayor -sonreí mientras sacaba el dinero del bolsillo de mi maleta - Hace 5 días que pasó su cumpleaños y que más buena idea traerle su pastelito favorito -deje el dinero.

La señora me cobró el pastelito y justo cuando iba a salir de ese lugar, que oficialmente se convirtió en uno de mis lugares favoritos, la señora me llamó.

- ¿Cómo te llamas? -preguntó.

- Yeji, Kim Yeji -le respondí - ¿Y usted? -le hice la misma pregunta.

- Kim Gyuri -se acercó a mi- Te quiero dar algo muy especial para mi y un regalo a tu hermana....

- ¡Jennie! -dije.

- A tu hermana Jennie -continuó.

La anciana subió por unas escaleras que estaban en el fondo de la tienda. Pasaron como dos minutos y la señora bajó con una caja de madera.

- Mira -se acercó con la caja - Yo cuando tenía tu edad, ponía cosas especiales para mi - me extendió la caja.

Abrí la caja con ciudad. Había todo tipo de cosas. Fotos, una muñeca, cartas y algo que me dejó con una intriga por saber que tenía escrito en su interior. Coji el libro en mis manos y me quedé demaciado alucinada con el hermoso dibujo que tenía en su portada. Mariposas de colores en medio de un bosque colorido y una chica en la rama de un árbol.

- Es mi diario -fijo su mirada en el diario - Allí hay escrito todo lo que me paso durante estos 87 años.

- Encerio, ¿Vas a dejar que una extraña acabada de conocer que se quede con tu diario y tus recuerdos? - pregunté un poco confundida.