El cielo triste y grisáceo se dio a conocer desde el amanecer, gotas finas caían en mi ventana de manera delicada a forma de brisa, casi.
Había despertado muy temprano por que el sueño no lo conciliaba tan fácilmente, el clima no era lo único espeso, mi mente lo era de igual manera.
Yacía en el suelo a lado de mi cama con una manta, mi cerebro dolía como en los días anteriores, quería dejar de pensar en las cosas que me atormentaban pero me era completamente inútil.
La noche anterior quería volver a casa con alguna respuesta lógica a lo que desde hace tres noches me tenía temerosa.
Pero no sólo regrese sin ninguna respuesta si no que ahora estaba más dudosa.Me abrace las rodillas y cerré mis ojos, no por el cansancio, más bien para que mis pensamientos se escurrieran como agua, para olvidar, tenía y necesitaba olvidar.
~<>~ Once horas antes ~<>~
La oscuridad del callejón ya casi no me permitía ver sus expresiones, decidí acercarme un poco más, cuando logre ver su mirada contuve el aire.
Sus ojos salvajes me decían que algo está mal, lo presentía y no me equivoque; un auto negro se estacionó bruscamente delante del callejón y me sentí pálida.- No te muevas mucho, déjame hablar a mi y ni se te ocurra algo estúpido. - me dijo en mi oído mientras jalaba de mi cintura suavemente.
Sentí electricidad y mis latidos fuertes.
Cuatro hombres salieron del auto, claramente mayores, incluso más que Connor.
Se aproximaron a nosotros.-Connor, que agradable volver a encontrarnos. - dijo con voz grave el más alto de ellos.
- No se sí puedo decirte lo mismo. - La mirada de Connor era inexpresable.
El hombre alto se río bajo, luego hizo una ademan para referirse a mi.
Me estremecí.- Dime que es la chica correcta, dime que es ella.
- Lo es. - respondió Connor.
- Vaya, vaya, después de tantos años. - su voz era aterciopelada pero sin duda llevaba veneno en cada palabra, los cuatro hombres se tensaron pero tenían miradas oscuras, como ansiando algo.
Una punzada de dolor apareció en mi cabeza, mis piernas temblaban y fruncí el ceño.
- Pensé que eras un incompetente, que sorpresa que la hallas encontrado, recibirás una buena recompensa por esto, ahora tenemos que llevárnosla.
Casi caigo algo suelo si no fuera por el fuerte agarre de Connor que ahora estaba en mi brazo, sentí pavor, ¿Llevarme? ¿Quién eran esos hombres? ¿Quién era Connor realmente? ¿En qué me había metido?.
Justo cuando creí que estaba perdida y de que Connor era más malvado de lo que había imaginado él me miro.- No, aún no. Ella ni siquiera sabe el poder que tiene, no nos servirá de nada si sus sentidos no están desarrollados, yo me haré cargo de ella por un tiempo, lo prometo, la tendré vigilada día y noche. - La voz de Connor era más segura.
- Y ¿Por que te dejaríamos a ti un trabajo tan importante?
- Por que soy capaz, por que soy leal y por que yo la encontré.
Los cuatro hombres se miraron entre sí, no parecían muy convencidos pero al final sólo se limitaron a decir:
- De acuerdo, pero nosotros estaremos vigilándote a ti, sí fallas ya sabes que pasara. - ahora sabía que el más alto de ellos era algo así como el "jefe" - Cuatro semanas, no más tiempo. - dicho esto dieron vuelta casi como robots y se metieron a su auto para después desaparecer.
Sin embargo cuando se fueron no sentí alivio, estaba aterrada y enojada, ¿Qué clase de broma era está? ¿Poderes? ¿Cuatro semanas? ¿Qué ocurriría después de ese tiempo?
Yo sólo había venido aquí para hablar con Connor y decirle que dejara esta tontería del tatuaje a un lado, pero ahora resulta que me han estado buscando, que soy valiosa y que por sí fuera poco tengo "poderes".Sentí estallar, mire a Connor furiosa y el frunció el ceño. ¿Qué esperaba? ¿Qué me soltara a llorar? ¿O que le rogará por una explicación? Entonces lo empuje con mi brazo libre y con todas mis fuerzas me solté de su agarre para después echarme a correr hacia el BMW.
El grito algo que no alcance a escuchar pero no me importo, no quería volverlo a ver nunca, quería irme de allí lo más lejos y rápido posible.Mis sentimientos estaban revueltos, estaba enojada claramente, pero lo cierto es que estaba más asustada que nunca.
Connor era peligroso tal y como lo había predicho, me maldije por haber venido, ahora sabía que estaba en problemas y que esto probablemente no tendría fin, sin embargo muy profundo en mi corazón no me maldije por haberlo conocido y me odie más por no hacerlo.
Acelere el BMW dejando que lo ocurrido se fuera con el viento, ya no quería respuestas, no quería saber nada de esos hombres, nada del tatuaje, nada de ese acuerdo, nada de Connor.
Aun que de eso último no estaba tan segura.
Llegue a casa al rededor de las 9:00 p.m y gracias al cielo mi tía aún no había llegado de su junta inesperada.
No tenía hambre así que subí directamente a mi habitación.Me había propuesto algo, seguir con mi vida como antes, hasta que poco a poco todo mal recuerdo se disipara y empece con mis amigos.
-Lydia, toma por hecho que mañana estaré en el club para escucharte tocar.- la escuche gritar de alegría a través del móvil.
~<>~
Si, estaba preocupada por que por más que intentara escapar de aquella noche mi dolor de cabeza siempre me hacia volver a recordar, y no estaba bien, algo en mi no está bien.
Hola chic@s, un capítulo más, disfrútenlo, perdón si tarde en subirlo, ahora gracias a la escuela subiré un capítulo cada fin de semana.
Gracias por leer.
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Liv
Teen FictionOlivia no es cualquier chica, su pasado es borroso y aún que parezca que todo va normal en su vida todo cambia cuando descubre un pequeño tatuaje en su espalda.