Dedicado a _Natt97_❤***********************************
37° Libro: Matilda.
"Tiene que ser muy inteligente para encontrarle aplicación a algo que no vale nada... A mí me encantaría poder hacerlo."
- ¡Vuelve aquí Toto! - gritó Beomgyu mientras aún seguía correteando al pequeño loro por todo el parque, Toto iba saltando alrededor de ellos por los arbustos las bancas.
Choi Soobin iba en pos de él, pero se detuvo agotado de correr, llevaban quince minutos persiguiendo a la mascota de Beomgyu, ¿razón? Por alguna razón se había ido del hombro de Beomgyu, ni siquiera ambos chicos podían explicarse el porque paso aquello.
No estaba en los planes de Soobin estar con Beomgyu paseando a su loro, y es que Beomgyu le pidió que lo acompañara para poder platicar un rato. El pelimorado había recibido una llamada después de haber concluido con su visita en el hospital.
- ¡Beomgyu, no está allí!
Soobin corrió hacia el árbol en dónde se encontraba Beomgyu buscando al pequeño loro.
- ¡Toto! - Beomgyu gritó lo más fuerte que pudo. En verdad que se sentía cansado.
- Aún no me explico como es que se fue si el nunca se aleja de ti.
- Seguramente algo le llamó la atención.
Soobin suspiro cansado.
-Debo vigilar a esa criaturita, es algo problemática- Dijo Beomgyu mirando a todos lados.
- Dejemos esto, vamos a buscarlo antes de que cierren el parque -Soobin comenzó a caminar y buscar con la mirada.
Beomgyu asintió a pesar de que sabía que Soobin ya no lo miraba y comenzó de igual forma a buscar al loro. A Beomgyu le gustaba ir al parque por las tardes y pasear con Toto por todo el lugar, pero nunca pensó que un día se escaparía para vagar libremente y él tuviera que buscarlo, usualmente el loro no se escapaba y siempre iba con Beomgyu como si de un hijo siguiendo a su madre se tratará, pero esta vez si se había escapado.
- ¡Toto! -gritaba Beomgyu para que su mascota lo escuchará.
- Es inútil -dijo Soobin buscando al loro con la mirada-. No se ve por ninguna parte.
- ¿Cuánto tiempo a pasado?
- Treinta minutos, ¡vaya Toto sí que sabe esconderse!
Beomgyu asintió en respuesta y camino otro poco para seguir buscando, en cambio Soobin miro hacia Beomgyu que de nueva cuenta seguía gritando el nombre de su mascota para ver si acaso aparecía o corría de entre los arbustos para volver a esconderse, pero no había ningún movimiento.
- ¡Soobin, ayúdame... que no podré solo buscar a Toto!
- Ya voy...
Algo tenía que admitir Soobin y es que Beomgyu se proponía muy bien buscar al pequeño loro lo más pronto posible antes de que anocheciera, Beomgyu siempre se esforzaba en muchas cosas, inclusive en pequeños detalles, aunque a veces no lo pareciera.
- ¡Allí está! -gritó Beomgyu corriendo hacia unos arbustos.
Soobin dejó de buscar detrás de un árbol y fue corriendo hacia su amigo quien estaba sentado en forma de loto frente a los arbustos, llamaba al loro pero este no quería salir, cada que Beomgyu quería acercar su mano Toto se apartaba y sacaba la cabeza, estaba jugando, pero Beomgyu no se sentía con mucho animo, lo que quería era que su pequeña mascota estuviera quieta para que así fueran a casa.
- Toto, ven vamos a casa - el Lorito de nueva cuenta salió corriendo de los arbustos, y de nuevo perdiéndose de la vista de los chicos, ambos suspiraron cansados.
Soobin miró el semblante de su amigo, se veía preocupado y tristes.
- ¿Beomgyu?
- Esto es inútil, no me hace caso, y ya está a pocos minutos de anochecer -miró a Soobin-. ¿Qué haré si no lo encontramos? ¿Qué haré si en verdad se pierde? ¡No quiero que eso pase! No quiero que este aquí con frío y hambre por mi culpa de no encontrarlo.
- Beomgyu, tranquilízate lo encontraremos.
- ¿Y si no lo hacemos? -Beomgyu bajo la mirada-. ¡Toto! ¡Esto ya no es divertido!
- Vamos Gyu, lo encontraremos juntos, levántate y vamos a buscarlo.
Pero el chico aún seguía en su lugar sin prestarle atención a su amigo, Soobin vio que algunas lagrimas comenzaron a rodar por las mejillas de Beomgyu y Soobin esta vez se preocupo, no debía llorar.
- Toto... -sollozó.
Soobin estaba a punto de acercarse para consolar a su amigo y darle ánimos pero algo en los arbustos llamo su atención, sin hacer ningún movimiento vio como la pequeña cabeza de Toto asomaba por los arbustos, a pasos lentos Toto fue acercándose a su dueño y se detuvo cuando escucho como este lloraba.
El pelimorado sonrió cuando vio al loro acercarse más y subirse en el regazo de su dueño para después comenzar a picotear las mejillas de este para limpiar los rastros de las lagrimas, los sollozos de Beomgyu fueron cambiando por pequeñas risas provocadas por las acciones de la pequeña mascota.
- Tenías razón Junnie.
"Inclusive hasta el ser que menos piensas que entiende tus emociones es capaz de hacerte sonreír en tiempos difíciles, inclusive solo si se trate de un instante de tristeza, basta que alguien este contigo para aliviarte."
- Vamos a casa Toto -Beomgyu tomo al Loro en sus manos y se levantó-. ¡Soobinnie, vamos a casa!
- Vamonos Gyu, antes de que nos quedemos aquí encerrados.
Definitivamente mañana Soobin tenía que contarle lo que paso a Yeonjun, y también leer algunos otros capítulos del libro "Matilda" de Roald Dahl, para Choi Yeonjun.
***********************************
Les cuento que nuestro querida Autora Lucy_Trejo27 me ha dado permiso para poder apartar la 2da temporada ❤🤧
ESTÁS LEYENDO
El Bello Durmiente 💫 - Yeonbin (Adaptación)-
RandomChoi Soobin lee un libro diferente cada semana para Choi Yeonjun, el chico de la habitación 127. El chico en coma. ☆Esta historia no es mía, es una adaptación de la historia original perteneciente a Luci_Trejo27 ☆Todos los créditos van a ella, esta...