4. Antes de clases

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—Jimin Park y Yoongi Min compartirán habitación. Por hoy tendrán permiso de permanecer en la sala común hasta tarde, pero normalmente hay toque de queda ¿Vale? —Los de primer año asienten con la cabeza—. Vale. Sus cosas están en sus respectivas habitaciones. Nada de salir de la sala común y no golpear los cristales. Más de una vez hay que arreglar agujeros y fugas de agua por eso.

Y quedan libres de explorar. Yoongi ve alrededor. La sala común es bonita. Al principio dudó, pues bajaron mucho a un espacio frío y húmedo. Las mazmorras. Al entrar, lo recibió un lugar elegante y cálido en colores fríos –irónicamente-. Se acerca a la ventana, pone las manos en el cristal.

—Estamos bajo el lago...

—Supongo que a las serpientes les gusta más los agujeros. Es acogedor. —Opina Jimin a un lado suyo.

— ¿Vamos a ver la habitación?

—Sísísísí.

Algunos susurran entre sí, señalándolos sin hacer mayor cosa. A pesar de estar perdidos, logran llegar a la habitación que les pertenece. Es un espacio grande con dos camas gigantescas y adoseladas. Los baúles a cada lado. Listos desocuparse. Yoongi se lanza de cara en la cama.

—Hace mucho frío aquí.

—Más excusa para no querer salir de cama.

—Jo~ Ya vi que tendré que despertarte para ir a clases.

Gruñe contra la tela y Jimin se apoya en el colchón. Yoongi es alguien muy delgado. Es extraño. También respira sumamente lento. Creyó que era a propósito, pero parece estar con la nariz tapada. Desde el tren, hasta ahora. Parece que en cualquier momento se asfixiará.

Tal vez tiene algún problema respiratorio. Saca un poco los labios. Dormirá con un ojo abierto, vigilando que su compañero de cuarto no se muera por estar bajo demasiadas almohadas.

—Hay que ser buenos amigos—indica sonriente—. Así que~ Hay que contarnos todo. Absolutamente todo ¿Si? Problemas de salud—Tienta—. Si necesitas ayuda.

—Me canso de todo. Mi aptitud física es un fiasco.

—Podemos mejorarlo. —Ofrece amable.

—No gracias. Cuando lo intenté, acabé en el hospital. Me duele el pecho y no respiro...—Entrecierra los ojos—. Tienes una especie de espíritu negro pegado a tu espalda.

Jimin parpadea repetidamente ¿De qué habla? Yoongi se sienta, viendo esa que lleva percibiendo hace un buen rato desde la cena. Jimin pareciera tener una especie de espectro adherido a su espalda. Una figura humanoide con enormes ojos rojos viéndolo fijamente, con su agarre paseando continuamente por su cuello, pecho y hombros ¿Lo peor? También lo notó en los demás.

El de Hoseok es inmenso. Con muchos ojos, lleno de sonrisas y ojos. El de Jungkook son manos que lo toman desde la espalda, rodeando los hombros y cuello. Jin parece tenerlo asfixiándolo y parecido a una nube que crece y baja por momentos. El menos uniforme es el de Namjoon. Literalmente una mancha gigante sin nada en especial más que cubrirlo de tanto en tanto.

En el comedor, repentinamente, todos tenían algo pegado a ellos. Sea una persona o una criatura sin forma. Es extraño. Distinto a lo que acostumbra ver.

—No entiendo... ¿De qué hablas?

—Desde que soy niño soy capaz de ver "espíritus" —Toma su cuaderno y se lo entrega—. Los intento dibujar, porque así demostraba que no estaba loco.

— ¿Y qué te decían? ¿Te creían? —pregunta pasando las pocas hojas usadas. Son retratos muy buenos. Yoongi niega con la cabeza.

—Buscaban cualquier excusa para negar lo que decía... Jin dijo en el tren que soy nigromante. No sé qué es eso, solo que-

Incognito: Echo Ignotum || BOOK 1#Donde viven las historias. Descúbrelo ahora