Incognito: Echo Ignotum || BOOK 1#

15. Irracional

Jungkook suelta aire, viendo a lo lejos Jimin sentado junto a uno de los prefectos de Slytherin. No sabe de qué están hablando, lo único que tiene claro es que Jimin lo abraza constante y cuando levanta para irse, le da un beso en la mejilla. El prefecto le palmea la espalda. Sube el labio inferior.

Jimin es muy cariñoso. Con prácticamente todo el mundo y a más confianza, mayor es el contacto. Tamborilea los dedos y alcanza a escuchar lo que dicen en una mesa no muy lejos de la suya. Gira la cabeza, con los ojos dorados y de pupila grande fijos en el grupo femenino.

—Es como ver una puta muy pequeña.

—Ay por favor, hay personas que son así de cariñosas. No por eso son malas o debe criticarse.

— ¿Acaso también te gusta? Entonces solo es más puta de lo que creía.

—Escuché decir de Camile que entró a solas con Wonho y Minhyuk a la habitación de ellos. Es una autentica zorra.

—Y ustedes unas auténticas mal pensadas.

—Solo decimos la realidad: Aparte de ser el niño más feo que haya visto en mi vida, es una zorra. Regalada, para peor. —ríe en voz baja. Un par de ellos se marchan, disgustadas y cambiando de tema a medida que salen del gran comedor en esta hora que se usa para estudiar, hacer tarea o hablar sin más. Jungkook no para de prestarle atención a las tres que quedan.

—Tal vez se está aprovechando de ellos ¿Sabes? Como no sirve en Slytherin, sencillamente se abre paso a través de otros. No tiene familia, no tiene nada relevante aparte de un culo grande. —Sacude la mano con desprecio y mala cara. Jungkook se aprieta los brazos, gruñendo bajo.

—Es una buena forma. Antigua como la vida misma. —Burla.

—Tal vez se le acabe el encanto si le damos pastillas vomitivas ¿Qué les parece? Traga más que nadie, no se va a negar si le damos algo diciendo que es otra cosa.

— ¡Pobrecito!

—Así deja de mover el culo y atraer en todos en Hogwarts. —replica disgustada.

—Eso también lo hace Taehyung.

—Entonces que sea a ambos. Ni siquiera tiene sentido. Son horribles.

—Hacen caras raras.

—Tienen cara gorda.

—Son-

— ¡Kookie!

Hay un silencio incómodo en el gran comedor y es que Jungkook había ladrado ¿Por qué? A saber, sin embargo, mantiene el gruñido, con la expresión contraída y revelando un poco de los dientes. Jimin lo toma del brazo, jalándolo hacia si para que deje de prestar atención. No sabe que pasa siquiera. Jungkook da tal tirón que lo atrae con él.

Las tres salen corriendo, asustadas. Jimin parpadea repetidamente y Jungkook se restriega la cara con una mano, bufando y quitándose el cabello para poder ver mejor. Sale del gran comedor dando pisotones. Con el morpho siguiéndolo.

— ¿Qué tienes? ¿Qué pasó? ¿Qué hiciste? —pregunta caminando a su par.

— ¡Es que son muy malas! Hablan muy feo de Tae y de ti.

—Ah, es eso.

—Son horribles. Son... —Rueda los ojos antes de volver a bufar con hastío.

—Algunas personas son así. Siempre va a haber quién te ame y quien te odie—Concluye con una sonrisa, rizando su cabello en tono rosa pastel—. No te angusties por algo como eso. No es la primera vez que me pasa. Es muy natural con las niñas, por desgracia.

— ¿Es porque eres veela? —Se encoge de hombros, inseguro al respecto—. Aun así, es feo ¿Por qué los magos son así?

—Los humanos somos así. Incluso en tu casa debe pasar, aunque no seas consciente de ello. —afirma con voz suave. Queriendo ver qué respuesta daría el niño. Jungkook sacude la cabeza.

— ¡Ahí lo dicen de frente! No son tan cobardes. —replica Jungkook, asqueado de que Jimin compare de esa manera.

—Eso me explica mejor porque dices y haces todo lo que piensas. —ríe Jimin, con las manos tras la espalda.

Jungkook baja la cabeza con un ataque repentino de timidez. Entiende perfectamente que no todos van a amar a los demás. Que habrá motivos para sentir inferior, molesto o con ganas de juzgar. Lo que poco entiende, es el motivo que impulsa a insultar de forma tan fea, a dar connotaciones distintas y pensar en formas de molestar a alguien que no hace nada.

Jimin no ha hecho nada a nadie. No merece que le hagan una mala broma. Que lo insulten así. No entiendo a los magos. Jimin acaba por abrazarlo mientras caminan.

—No te estreses~ De verdad pasa seguido. Estoy acostumbrado a que digan muchas cosas raras... ¡Así que no les presto atención! Si lo hago, me caigo más seguido ¿Eso tiene sentido? —pregunta, Jungkook niega con la cabeza.

—Te caes por todo, que lo excuses con eso es lo que no tiene sentido.

— ¡Shhhhh! ¡Es la explicación! ¡No me contradigas niño impertinente!

Jungkook arruga la nariz y acaba por tumbar a Jimin, abrazándolo con fuerza mientras está echado en el césped. Jimin acaricia el cabello de Jungkook, está un poco más liso estos días gracias a Jin. Quien se tomó el personal objetivo de hacerlo lucir menos salido de un bosque, que de las profundidades más oscuras del bosque prohibido vino Jungkook a ser el mejor de las clases.

Porque sí, el niño que jamás ha ido a un colegio en su vida es quien riñe para ser el mejor alumno en todas las materias. Lugar que Namjoon está luchando por ocupar. En sí, Jimin también, dejando ver algo que nadie creería y es lo terriblemente perfeccionista y rígido que es con el tema.

Pues una nota por debajo de la E, siendo esta la máxima, la considera un fracaso de su parte. Llega a ser todo lo quisquilloso que los otros dos no. Avanzando sin siquiera dar cuenta de que compiten por el lugar de mejor estudiante.

—Jimin huele bien. —Exhala, frotando la mejilla contra el pecho de Jimin, quien niega con la cabeza, aún acariciándolo y queriendo quedarse así un rato.