trece

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Después de dejar a Camila en su casa, Alex y Lauren Jauregui abrieron sus alas y volaron alto, más allá de las nubes que atravesaron Lucifer abrió un portal por donde entraron el y su hermana menor.

Todo se veía espectacular, había muchas nubes muy blancas y ángeles volando de aquí para allá. Encontró muchas esculturas de ángeles de piedra, llorando y Lauren Jauregui se maravilló por lo dramáticamente artístico que se veía; siguió a Lucifer en todo el camino, mientras sus ojos curiosos vagaban por los hogares que pasaban, era como ver la Polis Griega.

De pronto, observó como el suelo comenzaba a tornarse amarillo «¿Es eso oro?», pensó, notando lo brillante y muy resplandeciente que era.

―¡Cuidado!―escuchó el grito de Lucifer, y la ojiverde levantó su cabeza, dio un giro rápido cuando notó que estaba muy cerca de chocar con una estatua de pura plata.―Más cuidado hermanita, no quiero que papá te vea con un ojo morado.―dijo bromeando el Jauregui mayor, pero el tono preocupado se notaba de igual forma.

―Estoy bien, no te preocupes.―lo tranquilizó Lauren.

Solo unos minutos más de vuelo y por fin, después de tanto tiempo, estaban en frente del trono de su padre, que era realmente muy, muy grande. Volaron a su altura.

―Padre―lo llamó Lucifer, sonriendo y obteniendo el mismo gesto por su parte, rodeó con su brazo a Lauren―, aquí está su hija.―le dio un apretoncito a su hermana, para que dejara de sentirse tan nerviosa.

―Hola.―fue lo único que pudo decir Lauren Jauregui, con mejillas calientes, ojos brillantes y una sonrisa tímida.

Dios la observó y sonrió aún más, la alegría que sentía por volver a ver a su hija era mucho más grande que él.

―Hija mía―le llamó suavemente―, es una gran alegría volver a verte, cuéntame sobre ti.―la animaba a hablar.

Los ojos verdes se movieron nerviosos.

―No hay nada interesante―dijo en un susurro―, estudio y tengo tres amigas, mamá y papá me quieren mucho y siempre intentan demostrarlo.―su cuerpo se relajó al pensar en todos ellos.

Su padre soltó una risita, fascinado por oír sobre su hija y escuchar su voz.

―Me parece maravilloso entonces―le sonrió―¿Deseas comer algo? Jesús fue por unos bocadillos―negó la cabeza―. Es un glotón, pero así se le ama.―Dios y Lucifer rieron por eso, mientras que Lauren Jauregui solo pudo sonreír.

―Sí, me gustaría comer algo―asentía con la cabeza―, tanto volar da hambre.―tocó su estómago.

―Hola―alargaba la "a" un castaño con muchos panes, uvas y bebidas en las manos―. Oh, ¿Eres nueva?―calló rápido y negó repetidas veces con su cabeza―Lo siento, quise decir ¿Gustas algo de esto? El pan es muy rico, te lo juro por Dios.

Lucifer rio ante las palabras dichas y movió su mano rápidamente.

―Es Lauren Jauregui.―explicó, volviendo a reír ante la cara de sorpresa en Jesús.

Charlaron por horas, sin preocupaciones ni estrés, disfrutaron la comida y hubo una pequeña guerra de lanzar uvas en la boca de Lucifer, quien tosió fuertemente cuando casi se pasaba una uva entera. Todo fue alegre y calmado, como siempre era ahí, como siempre debería ser en todo el mundo.

Finalmente Lauren Jauregui y Lucifer se despidieron de ambos hombres para volver a donde la más pequeña realmente pertenecía, el Jauregui mayor tuvo que manipular las mentes de Mike y Clara Jauregui para que no hicieran preguntas y pudieran descansar y soñar en calma.

Camila Cabello despertó emocionada, se preparó para ir al instituto y caminó hasta llegar a el con una sonrisa, como hace ya mucho tiempo no hacía. Saludó amablemente a sus compañeros de clase―cosa que nunca hacía―y cuando sus ojos se encontraron con los de Lauren Jauregui, brillaron en alegría pura, con una sonrisa más grande la saludó y se sentó junto a ella. Lauren también se sentía muy feliz, ahora eran amigas y eso es lo que ella siempre había deseado, como mínimo.

―¿Cómo te fue, cómo te sientes?―le preguntó emocionada la morena, haciendo reír suavemente a la ojiverde.

―¡Fue genial!―exclamó en un susurro, temiendo que alguien pudiera escuchar su conversación.―Él es como, gigante y muy agradable―sus ojos destellaron en felicidad―. Y Jesús, es muy divertido, el, Lucifer y yo jugamos-

―¿Lucifer?―interrumpió de manera abrupta Cabello, mostrando una mezcla de asombro y preocupación.

Lauren cerró los ojos fuertemente, «Mierda» pensó «¿Cómo explicarte algo en lo que te inculcaron incorrectamente en toda tu vida?». Sintió sus manos comenzar a humedecerse y tomó una profunda respiración, solo para abrir sus ojos y encontrar unos marrones viéndola fijamente con expectación.

―Sí―respondió apenas en un suspiro―. Sé lo que crees y lo entiendo, porque desde pequeña te lo inculcaron; pero el no es así. No es malvado, ni nada de lo que la biblia y los creyentes dicen―ante la mirada desconfiada y la mueca en la cara de Camila, continuó―, es muy bondadoso y amable. Es divertido, le gusta mucho ayudar a los demás e incluso, junto a mi, es el favorito de nuestro padre.―terminó.

Camila Cabello es una chica hermosa, con su piel morena y sus ojos achocolatados, labios rosas y sonrisas juguetonas, pero sobre todo es inteligente; en su cabeza unió la palabra clave que Lauren Jauregui había utilizado.

«‟Hijo favorito"».

―Alex Jauregui―susurró con asombro, para la sorpresa de Lauren―, él es Lucifer.

La cara de Lauren Jauregui se iluminó en felicidad, sabía que Camila lo descubriría, pero no pensó que sería increíblemente rápido. Seguramente entendería ahora.

En el interior de Camila Cabello todo estaba en llamas por la guerra entre lo que le habían enseñado y lo que había visto, aprendido y vivido. Todo en lo que creía se derrumbó y todo lo que vivió apareció como soporte, «Quizás solo escribieron mal la biblia, quizás hubo un error. Quizás creí en ello de la forma incorrecta, quizás, quizás, quizás...».

Sus pensamientos de evaporaron cuando escuchó la voz de su profesora iniciando la clase.

Camila Cabello quería creer, pero no sabía en qué con exactitud. Y ese solo era uno de los problemas, pues el otro era la sensación de nervios y felicidad que explotaban en su estómago cuando Lauren Jauregui sonreía solo para ella.








Holaaaaaa, perdonen las faltas ortográficas. Este capítulo es algo corto, pero espero les guste y estén disfrutando de como va el fic.

XOXO.

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