Tres balas en el pecho #2

"Tres Balas En El Pecho 6"

Lo que queda de semana transcurre rápido y sin ninguna sorpresa de por medio. El equipo no es que tenga mucha confianza en mi, pero funcionará. Realmente ya estoy harta de todo esto, desde que me entere quien era mi padre, me dedique completamente a saber más y a evitar que me maten. Y por culpa de eso no tengo vida, no tengo amigos, familia ni compañeros de trabajo. Cada vez más siento que debería de hacer lo que dice papá, en cuanto acabemos con esto, me iré con él y me convertiré en un fantasma.

El día llega, y durante todo este entreno quemando la rabia que me brota de todos lados. Me preparé con el vestido de gala que había que llevar para que te dejarán entrar y nos subimos todos a la camioneta para repasar el plan. Aunque yo estaba más atenta a tener todas las balas en el arma. Luego Liam y yo salimos y nos subimos a un coche bastante caro y nos vamos a la entrada. Mi mirada cambió completamente a asesina, bajo del coche y agarrada del brazo de Liam, que también iba trajeado entramos al pequeño lugar con pinta de cutre por fuera. Pero cuando entramos, el lugar era sencillamente lo que me imaginaba, cuando decían que era una reunión de negocios mientras se jugaba al poker.

Mesas de poker barra y todo con un ambiente típico de mafioso. Liam y yo nos sentamos en la barra y nos sirven unas copas, mientras buscamos al objetivo. Aunque hubo una pequeña pausa donde Liam y yo nos enrollamos en el baño, tengo que añadir que le tenía ganas desde la segunda vez que lo vi, aunque una pena para no volverlo ha ver, pensándolo bien es una gran despedida, porque al poco de volver a la barra entra mi padre por la puerta, la señal para que empiece el juego. Antes de terminar la respiración que hago par a concentrarme en el objetivo Liam me interrumpe :

-Te tengo que decir una cosa antes de empezar.

Lo miro y vuelvo al objetivo mientras digo:

-Ahora no.

-Lara, trabajo para tu padre.

Le miro y empieza el juego, mientras intento procesar eso, derribo a los matones que no dejaban de llegar desde que derribe al primero entre puñetazos que repartimos los dos casi dándonos la espalda le digo:

-¿Desde hace cuanto, desde el primer día?

Mientras noquear de un codazo a un matón que volvía al ataque dice:

-Después de los tres tiros, tu padre me secuestro y me reclutó, me dijo que te siguiera y te cuidará del hombre que quería matarte.

-Eres consiente que no lo has hecho bien, por poco muero en más de una vez.

Digo propinándole un puñetazo en la nariz a otro matón que venía a por ni con sus puños.

-No estás muerta ¿no?

Al acabar con lo matones que quedaban alrededor de la primera sala dejando en pie a un par de matones de mi padre, a mi padre y a Liam, sacó la pistola que guardo en una funda bajo mi vestido y apunto a Liam, en milésimas de segundo. Mi mirada era seca, sin sentimiento, y sin el más mínimo pensamiento de dejarlo sin ningún agujero de bala. Lo miraba con cara de asesina y todos en esa habitación sabían que sería difícil que la cambiara.

Pansa un minuto intenso dos de nadie se mueve y yo no dejo de apuntarle con el arma y el seguro quitado. Mi padre se acerca a su lado y le pone la mano en el hombro, giro el arma hacia él. Su mirada era más intensa que la mía y lo único que hago es bajar el arma y caminar hasta el pasillo para matar al capullo que me ha hecho sufrir durante años y a echo que no vuelva a ver a mi madre. Tanta rabia contenida, sale y sin frenos. Noqueo a los guardias de fuera y entro en el despacho cerrando la puerta de nuevo.

-Te estaba esperando, cuanto tiempo no crees.

Estaba sentado en una silla frente al escritorio se reía jugaba con su añillo como aquella vez.

-Me vas a matar, no me lo creo, eres una cobarde como tu padre.

-Hay una sola cosa que no entiendo, ¿Por qué mataste a mi madre y me quieres matar a mi?

-Hay pequeña tu padre me la quito a mi primero, era mía, el muy estúpido hizo una familia con mi chica, no me quedó de otra que dejarlo vivir con su muerte y tu tortura.

Habla de mí madre como si fuera un objeto el muy patán, pero por fin honrare la muerte de mi madre y las torturas que recibí.

-Pregúntame porque voy de negro

Le dije seca y aun con el arma apuntando a su pecho, tras su respuesta sonrió y le contesto:

-Para tu funeral.

Tres disparos salen del arma que hay entre mis manos atravesándolo con dos balas en el corazón y otra en el centro de la frente. Bajo el arma y lo miro, mi padre y Liam entran en el despacho y los tres lo admiramos, tiro el pinganillo al suelo y lo aplasto. Luego miro a mi padre y lo abrazo sellando el final de estas torturas constantes.

Salgo de ese lugar con mi padre, sus matones y el que solía ser mi guarda espaldas, Liam. Desde esa noche, deje de ser Lara Gotti, hija del la gran ballena azul, el mayor mercenario, a La Dama De Negro, mercenaria y asesina buscada.

Las cosas cambiaron, entrene día y noche para ser la mejor luchando y matando a la gente que no le devolvía a mi padre lo que le pertenecía, me volví de hierro sin sentimientos sin dolor sin lágrimas. Y siempre me acompaña el único hombre del que me había enamorado, Liam y otros matones que estorbaban o me paraban para no acabar con las manos sucias de sangre. La rabia que seguía dentro de mi me impulsaba cada vez más a levantarme y a seguir matando a gente como Romanof.