El conjunto de vivencias colorean tu corazón hasta alcanzar una gama determinada, el cual, definirá todos tus pensamientos, sentimientos y preferencias. Para poder comprender el color, debemos entender de dónde proviene.
¿Qué es lo que reside en el...
⊱⋅Idea: Un misterioso libro aparece bajo la mesa de Rukia, dentro tiene varias notas que ha dejado su antiguo dueño para ella, ¿Logrará encontrar su amor por él dentro de sus páginas?⋅⊰
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Es una mañana de primavera de esas que huelen a felicidad. Camino alegremente sobre los pétalos de sakura caídos en el asfalto, tarareando una canción que suena en mis auriculares a todo volumen. Nii-sama va caminando a mi lado sin despegar la vista de su móvil, me inclino levemente para cerciorarme de que es su novia la que lo tiene tan concentrado. Y no me equivoco. Sin embargo hoy no tengo deseos de molestarlo, como se las vive dando de hombre muy serio me encanta recordarle lo cariñoso y cursi que se pone con la muchacha de cabellos cortos, prefiero centrarme en lo que me rodea.
El cielo está increíblemente azul hoy, las nubes se ven bien definidas, no como esos días de invierno en los que el cielo parece una triste mezcla de blanco que lo hace ver pálido. Por otro lado el follaje rosa que adorna los árboles los hace parecer de fantasía, mientras que todos los pétalos cubren el concreto haciéndolo parecer una alfombra bajo mis pies. Simplemente hermoso, tiene pinta de ser un día prometedor.
Cuando llego al instituto me siento en un banco aledaño a la entrada principal, no tengo deseos de estar en el salón a tan tempranas horas cuando aún faltan unos treinta minutos para el comienzo de la jornada escolar. Saco el libro al que le he entregado mi fin de semana completo.
Ah, había olvidado decirlo. Hoy es lunes.
Así que me zambullí en las páginas de En otro lugar. Me encantaba imaginarme que la vida después de la muerte sería así, había un toque de surrealismo que me encantaba y la rareza de todo en su totalidad es bastante atrayente, tanto que casi no veo a Ichigo y a Orihime frente a mí, de no ser por el primero, que me arrebata el libro y lo mira de cerca.
—¿En otro lugar?. En otro lugar estás tú últimamente— lo miro con fastidio aunque internamente reconozco que tiene razón.
¿Cómo describir lo que ha pasado para que no suene raro?
Ese libro apareció bajo mi mesa el miércoles, de forma bastante inusual. Cuando abrí la primera página había en ella un post-it azul con el siguiente texto:
Soy una persona cercana a tí... Y a la que le interesas mucho. Por favor lee este libro, dentro habrá más respuestas. Cuídalo, es muy importante para mí, es mi libro favorito, ahora es tuyo.
Lo primero que me transmitió fue intriga así que me llevé el libro a casa y comencé a leerlo. Al parecer la persona que antes lo tenía lo leyó unas miles de veces, porque habían esquinas de páginas que aún tenían una pequeña marca de doblado, habían frases señaladas con marcador azul y por supuesto dentro del libro habían más post-it. Era alguien que había previsto que lo leería y quería sorprenderme porque en algunas de sus páginas había algo azul: una plumita, pétalos, escarcha, estrellitas de hojalata entre muchas otras pequeñas maravillas. Ya estaba llegando al final del libro y tenía mucha noción de la persona misteriosa solo por lo que escribía, dejaba, leía y marcaba dentro del libro: era alguien sensible, inteligente, cuidadoso y tenía una leve pincelada de tristeza muy adentro casi transparente. Y sobre todo, tenía miedo a que lo rechazara. Era obvio que tenía que ser de mis conocidos, alguien de mi entorno probablemente de mi salón y, por un momento me entristecía pensar que había una persona tan maravillosa y a la que yo le interesaba tanto como para entregarme su libro favorito al que se notaba le tenía mucho apego.
