Prólogo.

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La lluvia no dejaba de caer con fuerza, dando una oportunidad perfecta a los demonios para deambular por las calles y realizar todos sus planes.

Los gritos eran silenciados por la fuerte lluvia, como también de los relámpagos que aquella entidad provocaba, así podía ocultar lo mejor posible su presencia y nadie podría quitarle su comida.

Pero no siempre las cosas resultan como uno lo desea.

Pudo escuchar como alguien se acercaba de forma lenta hacia donde estaba, le provocaba una gran furia que no le permitiesen terminar con su festín, era un premio doble, aquel humano con una alma podrida que había sido poseído por un demonio, hacia agua en su boca y aumentaba el sabor de su comida, ¡Pero estaba siendo arruinada por completo!

Se limpió la sangre de la boca con molestia, se dio la vuelta para encarar a la persona que se atrevía a molestarle durante su aperitivo, se encargaría de asesinarla lo antes posible y devorarla, no le importaba si era un humano con un alma pura y provocase un retroceso en sus planes.... Pero aquello era algo que no podía perdonar con facilidad.

-No creí que después de tantos años te volvería a ver mi querida Tami, sigues estando igual de bella.

-No me vengas con esas tonterías Lilith, sabes que odio ser llamada por ese nombre.

-Pero es el único que tienes, ¡Fue otorgado por tu querida madre!- se rió aquella demonios jugando con su largo cabello.

-Fue agradable cortar la cabeza de aquella asquerosidad...

Lilith no pudo evitar reír ante aquello que escucho, estuvo presente aquel día en que eso sucedió, se encontraba en primera fila viendo cómo era asesinada aquella ángel.... Un asqueroso ángel había sido asesinado y devorado por su propia hija.

-Lo recuerdo, cuando la devoraste, estuviste muchos años devorando a humanos o demonios para contrarrestar lo que provocó en tu cuerpo.

-Ve al punto Lilith, aunque seamos amigas no quiere decir que no pueda cortarte la cabeza.... ¿Por qué apareces ahora ante mi?

-Solo quiero ayudar a una vieja amiga, eso es todo.... Se muy bien que los exorcistas, los ángeles y los demonios desean tu cabeza por el simple hecho de haber nacido de un asqueroso ángel y de un demonio.... Ven conmigo y tendrás mi protección y la de Mephisto.

Tami se rió lo más fuerte que pudo, ¿Ella siendo protegida por ellos dos? ¿Por qué ahora a ellos les importaba su seguridad? Durante muchos años ha estado vagando sola por Assiah buscando la manera de poder ir a Gehenna, deseaba tanto poder ir al lugar en el cual su padre vivía y así poder asesinar a quien le arrebató su vida.

Se miró en el reflejo de la ventana, su largo cabello rubio con las puntas rojas y sus ojos rojos se habían vuelvo bastante conocidos entre los exorcistas y cada día intentaban darle caza sin dejarle descanso alguno... Desde aquel día que se interpuso entre aquel exorcista que intento asesinar a Lilith años atrás, ¿Cuál era el nombre de aquel molesto sujeto? No podía recordarlo, pero también se encontraba en la lista de las personas que desea asesinar.

-¿Cuál es tu respuesta mi querida amiga?

-Aceptare ir contigo... Pero sabes que no confío en Mephisto.

La sonrisa de Lilith se hizo más grande, de su escote saco una de las tantas llaves que Mephisto le había otorgado, pronto estarían ante él.

Seductora amenaza.  [Rin Okumura x Oc]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora