Perdonen que sea en DXD y no en otro lado, pero me dieron ganas de hacer esta historia ahora que tengo la inspiración.
-¿Crees en la reencarnación? Si no, imagina que en un universo lejano eso es posible, imagina que tu reencarnas. ¿Qué harías?
Nota...
Los años pasaron, me metieron a la escuela y al darse cuenta que mi intelecto era mayor que el de un niño de seis u ocho años me pusieron en sexto, diciendo que por lo menos debería pasar este grado. Issei se volvió mi hermanastro, nuestra relación era algo así como Sasuke e Itachi, el me quería mucho pero yo no le ponía atención y me dedicaba a leer, hacer las tareas de la escuela o ir a cazar para comer.
Cuando Issei tenía 6 años conoció a Irina, la cual quería que yo jugara con ellos pero nunca lo hacía. En una ocasión estábamos solos así que decidí hablar sobre su identidad.
-Eres mujer, ¿cierto?
-¡¿Qué?! ¿Cómo lo sabes?
-Simple intuición. Ahora que me lo confirmaste, ¿qué quieres que haga?
-Por favor, no le digas a Issei.
-¿Por qué?
-No sé como reaccionaría si se enterara que su mejor amigo es en realidad mujer.
-De acuerdo, no le diré nada.
-¡¿De verdad?!
-Con una condición.
-¿Eh?
-Diviértete y se tu misma. Debe de sentirse mal ya que nunca le presto atención.
-De acuerdo. Pero, ¿por qué no juegas con nosotros?
-Mi tiempo de jugar pasó hace mucho. Además, es mejor que ustedes dos jueguen juntos. Después de todo, son de la misma edad.
-Okay.
Entonces Issei llegó y se puso a jugar con Irina, mientras tanto yo me fui a comer y entrenar más.
Cuando Irina se tuvo que ir, se llevó la espada e Issei estaba triste, sin embargo era el mejor momento para irse ya que unas semanas después se volvería un pervertido. Yo ya estaba estudiando en la preparatoria, debido a que la secundaria me habían hecho un examen que revelaba que debería estar en universidad, sin embargo no podían dejar que mi expediente estuviera vacío por lo que me obligaron a estudiar el tercer año donde todos me trataban mal al principio pero luego se dieron cuanta de su error y me dejaron solo. Justo como a mi me gusta. Cuando me gradué de la secundaria no pedí una fiesta, en realidad no pedí nada. Cuando hice el examen para la preparatoria pasó lo mismo, sin embargo se negaron a subirme de grados así que tuve que estudiar los tres años, siendo que ya me iba a graduar en ciencias y humanidades.
Luego de graduarme buscamos una universidad que me aceptara, sin embargo era difícil encontrar una universidad que aceptara a un niño de diez años que aparentaba los catorce. Finalmente encontramos una que me llamó la atención, era parecida a...
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-Kami.
-¿Conoces la universidad?-me preguntó la señora Hyoudou
