Perdonen que sea en DXD y no en otro lado, pero me dieron ganas de hacer esta historia ahora que tengo la inspiración.
-¿Crees en la reencarnación? Si no, imagina que en un universo lejano eso es posible, imagina que tu reencarnas. ¿Qué harías?
Nota...
Estaba varado, en la "nada" cuando sentí como si la gravedad me hiciera ir hacia un lugar. Conforme pasaba el tiempo pude ver una luz que se hacía cada vez más brillante y finalmente me estampe contra ella, por reflejo cerré los ojos y al abrirlos me encontré con lo que según yo era el cielo.
-Veo que ya has regresado. Dime, ¿cómo te fue?-me preguntó un hombre detrás de un atril, lo reconocí después de unos segundos, era Pedro, el vigilante de las puertas del cielo.
-...-Yo no le respondí, no tenía mis pensamientos en orden, no completamente.
-Vamos, pasa. Te está esperando.-al decir esto la puerta que vigilaba se abrió, era una puerta de rejas doble de color dorado que dejaba ver únicamente unas nubes blancas, no había muros que la rodearan, solo el espacio para ambas puertas.
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Nuevamente la gravedad me llevó, viaje durante unos minutos hasta que llegué a una pared de nubes, me estrellé contra ella pero al ser de nubes la traspasé, adentro de la pared había una figura de un hombre
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-Bienvenido de vuelta.-dijo.-Dime, ¿Cómo te fue?
-Bien, supongo.-dije con una voz que no expresaba ninguna emoción.
-¿No te gustaría contarme nada?
-No tiene sentido, tu ya sabes lo que hice y lo que me pasó. Solo intentas hablar conmigo para hacerme sentir mejor.
-Tienes razón, pero es natural querer hablar con uno de mis hijos.
-Dejemos esto, ¿si?
-De acuerdo. Pero antes, deberías decirles lo que ocurre.
Antes de venir a este lugar, estuve en dos lugares. El primero fue la Tierra 0, la llamé así ya que ahí fue donde todo empezó. En esta Tierra viví una vida normal, tranquila, aburrida si lo quieres decir. Cuando morí Dios me dijo que me enviaría a otro lugar, ya que aunque probablemente no me lo merezca Él dijo que quería que viviera por mi propia cuenta, pero antes de enviarme a ese mundo me enviaría a otro para que aprenda algunas cosas, ese es el segundo mundo al que fui. Tokyo Ghoul. Viví las experiencias de Ken Kaneki y mi forma de ser cambió, por eso mi forma de hablar sin emociones, el dolor experimentado es mayor al que alguna vez tuve en la Tierra 0.