—Cerca, bien cerca. Estoy... en algún lugar estoy?
No puedes tocarme así como no se puede
tocar el amor... pero si puedes sentirlo. No.
No estoy entre la tierra. Estoy en la sonrisa
de tu recuerdo. Estoy en el silencio de tu
suspiro. Estoy en la carita de quien ha nacido.
¿Escuchas el eco que se produce cuñado ríes?,
ese soy yo. Estoy, créeme que estoy. No tan
lejos, no me busques tan lejos, estoy cerca,
bien cerca, a tu lado. Te sostengo cada vez
que quieres caer, te acaricio cada vez que
empieza a doler. Yo se que me sientes, yo te
conozco, yo te veo. No se es locura. Estoy aquí.
Cerca, bien cerca. No se puede separar lo que
se ata en el corazón. No se puede matar un
sentimiento. Solo muere quien es olvidado.
Te cuido, te protejo, te acompaño. No te he
dejado... tan solo me adelanté un poco en el
pasó... y volveremos a estar juntos. Cuando nos
reencontremos, nadie lo sabe. Mientras tanto
estaré aquí, a tu lado. Cerca, bien cerca... hasta
el último día de tu viaje.