Oᴜʀ Oᴡɴ Hɪsᴛᴏʀʏ

Capítulo~7

Narra Astrid

Era... Mi padre.. Pero venía cansado y sudado, deje que hablara.

-Astrid... Es tu madre - eso hizo que yo me empezará a preocupar - Me acaban de llamar del hospital... Recibió un Disparo.

-No... No... Necesito ir con ella, Zack! - llame.

-Si! Ya voy - todos vinieron mientras que el mencionado tomaba las llaves de su carro.

-... No vas a venir? - le pregunté a mi padre.

-Si.. Ya voy - baja la cabeza.

-Vámonos ya, Zack.. Ya! - grite.
.

.

.

En cuanto llegamos al hospital preguntamos por mi madre.. Aun estaba en revisión.. Pero... No le daban muchas esperanzas.

Ella es fuerte.. Y lo sabía, así que.. Puedo decir que ella luchará y saldrá de esta.

-Familiares de la señora Erika Hofferson?!? - Exclamó un doctor.

Mi padre y yo nos paramos.

-Señor... Hofferson.. Necesito hablar un momento, a solas - aclaro al verme ir con el.

Con razón mi madre se había tardado más de lo esperado en las compras.

Yo me sentía mal.. Muy.. Mal.. Pero confio en que sobrevivira.

Heather, Zack, Jack y Mike nunca se separaron de mi.

-Hija... Ve un momento con mamá.. Puedes pasar - me dice mi padre muy decaído. ¿Que esta pasando?.

Entre a aquella habitación blanca y vi a mi madre.

-Hija... Acércate.. - habla como puede, se le ve muy adolorida.

-Mamá.. No hables.. Por favor - suplico sintiendo mis ojos arder.

-Hija... Yo... Siento no darte.. La vida.. - paro un poco para toser - La vida.. Que te mereces.. Tu.. Fuiste una luz en mi vida tan... Oscura... No culpes a tu padre.. A veces, pasan estas cosas.. Yo.. En serio siento.. Todo lo que hice mal..

-Mami... No hables por favor, por favor

-Lo que quiero decir es que.. Quiero que consigas alguien que te ame.. Y tengas una familia pero sobre todo que.. Seas feliz.. Eso es lo que quiero para ti.. Prometelo - me pide.. Pero ¿Porque?.

-Mamá yo..

-Prometelo Astrid... - susurra.

-Lo prometo mamá..

Narro yo (Se que estamos en el peor momento.. Así que.. Sigamos con esto)

-Te amo... - la rubia dio su último suspiro para por fin.. Descansar en paz.

-¿Mamá? - cuestionó Astrid al ver que la mano que la sostenía se había resbalado - Mami...?.. ¡Mama! No! Mamá despierta, mamá.. Por favor - suplico la chica.

En eso su padre, sus amigos y algunos doctores entraron a la habitación.

-Mamá!.. Mamá... - susurra.

-Hi-hija... Ella.. Murió.. - soltó su padre triste.

-No.. Ella.. Es fuerte - se guardo sus lágrimas.

-Lo siento mucho.. - se disculpo un doctor - Pudimos hacer algo.. Pero.. Tras ocho disparos... Es difícil darle esperanzas.

Narra Astrid