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Christopher

Christopher:bien,ya llegamos.

Dulce:puedo quitarme la venda ya?–pregunto ya que minutos antes de llegar a el lugar christopher le pidió que se colocara una venda en los ojos que a regañadientes aceptó usar.–

Christopher:si,puedes quitártela ya.

Dulce:por fin,no me gusta vendarme los ojos,no me da confianza.

Christopher:esta vez estás conmigo,nada malo sucederá,ahora voltea y ve a tu alrededor espero y te guste.–dulce así lo hizo y miro lo que la rodeaba–te gusta?

Dulce:mi amor,esto...esto es asombroso–Dijo observando la decoración que chris había hecho dentro de una pequeña cabaña que se encontraba alejada de la ciudad–la decoraste igual que aquella vez que me llevaste a una casi idéntica después de pedirme matrimonio.

Christopher:si,quise hacerlo ya que esta vez quiero hacer algo similar,no te pediré matrimonio por que ya estamos casados pero lo que quiero hacer es pedirte que renovemos nuestros votos,aceptas?

Dulce:por supuesto que si chris,nada me haría más feliz que renovar nuestros votos,se qué tal vez algunas cosas cambiaron pero el amor,eso es algo que sigue igual desde el primer día.

Christopher:te equivocas,el amor que yo siento por ti es aún más grande.

Dulce:sabes a lo que me refiero,nuestro amor nunca se irá a pesar de todo.

Christopher:eso es lo que más deseo,desde hoy empezamos una vida nueva,tengo una esposa increíble y a un hijo que con los días,meses y años amare cada día más como lo hago contigo.

Dulce:y yo tengo a un esposo tan cariñoso,comprensible,magnífico que amo con todo el corazón y a un hijo que de igual manera lo amo,que daría la vida por ambos y que nunca los dejare de amar como lo hago y lo haré siempre.

Christopher:pues brindemos por eso!–tomó dos copas en las cuales sirvió un poco de champán para dulce y el e asi brindar por la nueva vida que estaban apunto de comenzar–te lo diré una y otra vez te amo.

Dulce:yo también.–ambos bebieron un poco de champán para que después chris dejara su copa aún lado y tomará la de dulce para hacer lo mismo e empezar a besarla con amor–

Christopher:sabes lo que haré no?

Dulce:si,lo sé...

Christopher:ven,acompañame.–Tomó la mano de dulce y la guió por un pequeño y estrecho pasillo hasta llegar a una habitación la cual estaba decorada con pétalos sobre la cama y velas por todos lados–esto es para ti y para que siempre recordemos lo que sucederá en esta habitación.

Dulce:es hermoso y créeme que siempre lo recordare,lo recordaremos así que ahora has lo que corresponde.

EL ENGAÑODonde viven las historias. Descúbrelo ahora