Cap. 16: "Despertar"

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Zhan había regresado al hospital y se encontraba terminando de atender otra urgencia, había sido una noche movida y ya estaba por amanecer. En todo ese tiempo, no había podido olvidar la mirada que Yibo le había dado, no la podía descifrar. Sabía que había un deje de decepción, pero también había nostalgia. Tratando de calmar su corazón empezó a jugar con su cinta que se encontraba en el bolsillo de su pantalón, dando un largo suspiro esperando que su bendito turno terminara, para poder ir a descansar y solucionar las cosas con Yibo. Cuando por fin terminó, fue directo a su apartamento, apenas toco la cama quedó dormido.

- ¿Dónde esta?.... Lan Wangji... - Al entrar en la cueva sólo pudieron distinguir a dos cuerpos, uno recostado sobre una roca, cubierto de sangre, mientras del otro ya no quedaban rastros del niveo color de sus ropas que también estaban teñidas de sangre y suciedad. Mientras uno le pasaba energía el otro sólo balbuceaba incoherencias. Cuando los vio entrar los miró con una súplica en sus ojos.

- Hermano....tío....

- ¿Lan WangJi qué significa esto?... - Lan Qiren no podía creer lo que estaba viendo. Cuando Lan Xichen le dijo que Lan Zhan había ayudado a escapar a Wei Wuxian no lo creyó, pero ahí estaba, tratando de salvarlo - déjalo tiene que pagar...

- No...

- Hermano...

- No... es lo que es... no me alejaré de él...- continuaba pasándole energía intentando que recobre la conciencia - Wei Ying... por favor...por favor... vuelve a Gusu conmigo...

- ¡Pierdete...!

- ¡Lan Zhan...!

Despertó bañado en sudor y con la respiración agitada y su brazo estirado como queriendo agarrar a alguien... Lan Zhan, ahí estaba ese nombre de nuevo, porque su corazón dolía tanto cuando lo recordaba. Cuando miró el reloj vio que pasaban del mediodía, se pegó un baño, comió algo y llamó a Bowen, necesitaba que lo llevara con Yibo de una vez.

Había pasado toda la noche mirando el techo y acariciando a uno de sus conejos. Para asegurarse que cumpliera con el reposo y no se fuera al cuartel, Madam Yu lo había llevado de nuevo a su casa y ahí estaba en su antigua habitación. Miraba los posters, las medallas y los trofeos que seguían ahí como cuando era un adolescente. No pudo evitar recordar su vida, su nueva vida. Porque desde que despertó otros recuerdos también vinieron a su mente, de una vida pasada, recuerdos que florecían cada vez que Zhan estaba con el. Todavía recordaba el sueño que tuvo en el hospital. Wei Ying, se parecía tanto a Zhan. Y lo que había visto esa noche, como aquella vez, alguien más estaba tocando lo que era suyo, y no lo soporto. Cerró fuertemente los ojos, lo peor era que era su Teniente. Pero, se iba a asegurar de dejar en claro que Zhan era suyo. Al final el sueño lo venció y cayó rendido abrazando a su conejo.

- ¡Pierdete...!

- ¡Lan Wangji!...es la última advertencia deja al Patriarca Yilling, deja a Wei Wuxian.

- ¡No...!

- Hermano ...por favor...no podremos protegerte...¡ven con nosotros...!

- ¡No...!

- ¡Lan Wangji...!

- ¿Te pondrás en contra de tu propio Clan... de tu secta...?... ¿por ese...?

- ...

- Debemos sacarlo antes de que lleguen los demás... ¡agárrenlo!

- ¡Wei Ying... por favor...!

- ¡Piérdete!

Xiao Zhan se encontraba en el auto con Bowen frente a la casa de Yibo, ya hacía media hora que habían llegado y todavía no se animaba a bajar.

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