Llegamos justo a tiempo a la cita en el salón y como lo había dicho, hay varias chicas de mi escuela.
-Por aquí.
Una chica con el cabello corto y color azul me lleva por el salón hasta una silla que está frente a un espejo. Me siento en la silla y ella me pone la típica bata de estética.
-¿Qué te vas a hacer?- me pregunta.
-Ammm no tengo idea, has lo que quieras, sólo pido que me dejes el cabello un poco largo.
-Muy bien. Vas a maquillarte también, ¿no?
Asiento.
Mi tía se sienta en una sala pequeña a leer un libro. Uno de los trabajadores le ofrece una botella de agua y ella acepta.
La chica de cabello azul conecta un rizador de cabello y toma un peine para cepillarme el pelo.
-¿Cómo te llamas?- me comienza hacer platica.
-Roh. ¿Y tú?
-Mi nombre es Lizzi.
-Me gusta tu cabello- le digo viendo la por el espejo. Ella sonríe.
-Gracias a mi también me gusta tu cabello. Es muy suave.
Y así platicamos en lo que ella me riza las puntas de mi cabello.
-Muy bien. La idea que tengo es recogerte esto- toma un gran pedazo de mi cabello-, como una media cola y con spray, fijar todo el cabello de los lados hasta un poco más de tus orejas- me muestra como-. Y entonces así quedará una especie de cascada de rizos y seguirás teniendo tu cabello largo ¿esta bien?
-Claro.
Sus manos manejan los objetos de estética a la perfección. No tarda ni treinta minutos en fijarme todo el cabello de mi nuca y arreglar los rizos que se han caído.
-Muy bien, ya quedó tu cabello. Vamos con el maquillaje, ¿de qué color es tu vestido?
-Azul rey o algo así, pero no quiero usar sombras en los ojos. Sólo un delineado y rímel está bien- digo rápidamente.
-Muy bien, entonces así lo haré.
Me limpia la cara y la humecta. Luego me aplica con su dedo el corrector para las ojeras, manchas rojas o imperfecciones; después con un delineador negro líquido comienza a ponérmelo en los ojos. Me da el rizador de pestañas y me pide que me las rice. Lo hago y después me pone rímel.
-Siento que le falta algo...- murmura para ella sola.
Se levanta del banco en el que esta sentada y va a un mueble de ruedas. Busca en uno de los cajones y regresa con un tubo de delineador.
-Este delineador tiene brillos plateados. Lo voy a usar para que se vean mejor tus ojos.
Me pone un poco en las pestañas de abajo y para terminar me pone la base y la sella. Después un poco de rubor en mis mejillas y nariz, para terminar con el labial.
-Terminamos.
-Gracias.
Me miro al espejo. No me veo tan mal... Simple, pero no mal.
Mi tía va a la caja a pagar y le deja una buena propina a Lizzi. Nos despedimos y vamos a la casa.
Llego y subo corriendo las escaleras. Me quito la ropa y me pongo el vestido. Tomo el pequeño bolso que Jay me regaló y guardo mi teléfono y mis zapatos de piso. Tomo el abrigo blanco y bajo a la sala.
-Te ves hermosa mi amor- dice mi tía-. Te tomaré una foto.
Ruedo los ojos y poso para la foto. El flash me deja ciega por un momento.