Yoongi termina de comer el desayuno que le trajo el Alfa, levanta levemente su vista al escuchar el sonido de la puerta y ve como el chico rubio entra con una pequeña sonrisa, revisa el armario y unos cajones, sacando unos pantalones y una remera además se unos calzoncillos nuevos, ya que aún se nota el empaque y le tiende estos con un pequeño sonrojo.
— Puedes darte una ducha y usar esto —. Deja la ropa en la esquina de la cama y toma la bandeja de las manos del pálido para llevarlos a la cocina.— el baño está allí, a la izquierda, siéntete como en tu casa.
Yoongi ladea su cabeza mientras mira al alfa, siente como su lobo se remueve en su interior al mirar al chico. Asiente lentamente y el rubio le sonríe mientras sale de la habitación.
El pálido suelta un suspiro, toma la ropa y se encamina hacia el baño, al abrir la puerta no puede evitar dar un paso atrás, el lugar está infestado con el olor del alfa haciendo que sus piernas flaqueen un poco y su corazón salte como loco en su pecho.
Deja la ropa en el tendedero y procede a quitar la suya, soltando una pequeña maldición al sentir su piel caliente y es que su celo estaba a flor de pie, no sé sorprendía si comenzaba a llamar al alfa que se encontraba en la parte de abajo. Aunque el baño y toda la habitación olía a él podía sentirlo en la planta de abajo y eso le enloquecía.
Despojándose de sus ropas entra en la regadera y deja que el agua fría borre esos pensamientos impuros que rondan por su cabecita. Procede a lavar su cabeza y luego restregar su pálido cuerpo. Suelta un pequeño suspiro ya que el champú igual olía a ese alfa.
Negando con su cabeza procede a enjuagarse. Toma una toalla y envuelve su cuerpo en esta, observa el lavamanos y se toma el cepillo nuevo, le quita el envoltorio y procede a lavar sus dientes. Mira su reflejo en el espejo y se da cuenta de que sus mejillas están coloradas. Agita su cabeza y procede a enjuagarse los dientes y secarse.
Una vez ya cambiado, toma sus ropas y las pone en la cesta de ropa sucia que había en el baño, nuevamente observa su reflejo y ve que la camiseta que le había dado el rubio le quedaba un poco muy grande al igual que los pantalones que estaban algo flojos más no se caían.
Bajó las escaleras y se encontró al alfa mirando televisión, este se volteó y le sonrió, sus ojitos brillaron y el corazón del pálido dió un vuelco.
Era precioso
Si bien el pálido debía de estar alerta ya que no conocía para nada al chico, pero igual ese chico lo había salvado de unos alfas estúpidos y su lobo estaba tranquilo y Agusto con su compañía por lo que confiaba un poco en el chico.
Algo inseguro se sentó en el sofá a una distancia prominente del Alfa, sus hormonas estaban algo agitadas y no quería tener un pequeño accidente así que bajó la mirada tratando que que su rostro sonrojado no sé notara tanto, aunque sería casi imposible por lo pálido de su piel.
— ¿Puedo irme a casa de mis padres? —. Jimin frunce levemente su ceño al ver como el pelinegro aprieta sus manos que reposan sobre sus rodillas.
— Estás en celo —. Afirma preocupado no dejaría que el Omega saliera en ese estado podría ser arriesgado, la noche anterior tuvo suerte de llegar a tiempo. De solo no haber seguido al omega...
Agitó su cabeza olvidando esos pensamientos mientras suspiraba levemente.
— Lo sé, pero me sentiría más seguro si estoy con ellos —. Yoongi murmura mordiendo su labio inferior.
Jimin siente como su lobo lloriquea en su interior, su omega no se sentía seguro con ellos.
El pálido al ver la mirada abatida niega con sus manos. — No es que no me sienta seguro contigo, si lo estoy, además estoy muy agradecido por qué me hayas ayudado y acogido en tu casa, además de prestarme de tu ropa y alimentarme. Pero no quiero molestar y bueno..
— ¡No me molestas! —. Casi grita en rubio haciendo sobresalta un poco al Omega —. Digo, está bien y no hay de que, lo volvería a hacer una y otra vez con tal de que estés a salvo — afirma con seguridad el rubio.
— Ni siquiera nos conocemos —. Murmura el pálido jugando con sus dedos tratando de calmar el retumbar de su corazón las palabras del rubio lo habían agitado.
— Park Jimin, un gusto.
Tu futuro alfa y padre de tus futuros cachorros, piensa mientras sonríe extendiendo su mano.
— Min Yoongi, un placer conocerte.
El pelinegro le sigue el juego igual sonriendo rogando para que el de labios gorditos no escuche lo rápido que latía su corazón.
— Ahora que recuerdo debo avisar am instituto que voy a faltar unos días.
Avisa el rubio cuando sus manos dejan de tocarse.
— ¿Por qué vas a faltar? — pregunta el pálido ignorando el reciente choque eléctrico que sintió cuando sus manos se rozaron.
— No es obvio, voy a ayudarte con tu celo.
Yoongi observa al de ojos claros mientras siente un cosquilleo por todo su cuerpo al ver la mirada decidida de este.
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Hola bebés, he vuelto.♡
¿Cómo están?
¿Cuánto tiempo ha pasado ya?
Mucho, la verdad les extrañé un montón NCKDKFKF, no sé pq pero tenía un bloqueo mental y no pude escribir nada.
Además que la Uni y esto de la pandemia Pero ya estamos aquí.♡
No sé si se han dado cuenta pero la historia está cambiando un montón, está vez quiero que sea vayan más lento, de conozcan más y toda la cosa skkfkdkd.
