La luz de la mañana se filtraba suavemente por las cortinas de la habitación, anunciando el comienzo de un nuevo día. Jimin se despertó con la sensación de algo cálido y suave acurrucado a su lado. Abrió los ojos y sonrió al ver a Yoongi, aún dormido, con una expresión de paz en su rostro. El alfa se quedó unos momentos observando al omega, su corazón latiendo con un profundo afecto.Se levantó con cuidado, asegurándose de no despertar a Yoongi, y se dirigió a la cocina para preparar el desayuno. Sabía que el omega necesitaría muchas energías durante su celo, especialmente considerando lo prolongado que era. Mientras cocinaba, no podía evitar pensar en lo que había ocurrido el día anterior. Había sido un desafío contener sus propios instintos y deseos, pero estaba decidido a cuidar de Yoongi de la mejor manera posible.
Poco después, Yoongi se despertó y se dirigió a la cocina, atraído por el delicioso aroma. Sus ojos aún estaban un poco nublados por el sueño, pero una sonrisa se dibujó en sus labios al ver a Jimin ocupado en la cocina.
— Buenos días, Jiminie. —dijo Yoongi, su voz aún cargada de sueño.
— Buenos días, Yoonie. —respondió Jimin, girándose para mirarlo—. ¿Dormiste bien?
— Sí, gracias. —respondió Yoongi, acercándose a la mesa—. Huele delicioso dijo el pálido refiriéndose al desayuno y al olor del alfa no pudiendo evitar suspirar
Jimin sonrió y terminó de preparar el desayuno, sirviendo dos platos con esmero. Se sentaron a comer, y aunque el ambiente era relajado, había una tensión subyacente debido al estado de Yoongi. Ambos lo sabían, pero intentaban mantener la conversación ligera.
— ¿Qué planes tienes para hoy, Yoonie? —preguntó el alfa, tratando de desviar la atención de los desafíos del celo.
— Bueno, planeaba descansar un poco y quizá trabajar en algunas trabajos pendientes. —respondió Yoongi, tomando un sorbo de su café.
— Eso suena bien. —Jimin, sonrió mientras le miraba —. Si necesitas algo, no dudes en decírmelo.
— Gracias, Jimin. —dijo Yoongi, sintiendo una ola de gratitud hacia el alfa.
Después del desayuno, se acomodaron en la sala. Yoongi intentaba concentrarse en su trabajo, pero su mente seguía volviendo a Jimin. La cercanía del alfa hacía que sus instintos se despertaran, y aunque intentaba controlarse, no podía evitar sentirse atraído.
Jimin, por su parte, también luchaba con sus propios deseos. El aroma de Yoongi era embriagador, y cada movimiento del omega parecía diseñado para tentarlo. Pero estaba decidido a respetar los límites de Yoongi y asegurarse de que se sintiera seguro y cómodo.
— ¿Jiminie? —la voz de Yoongi rompió el silencio.
— Sí, Yoonie. —respondió Jimin, girándose para mirarlo.
— Gracias por todo esto. —dijo Yoongi, sus ojos reflejando una mezcla de emociones—. No sé cómo hubiera manejado esto sin ti.
— No tienes que agradecerme, Yoonie. —respondió Jimin con suavidad—. Estoy aquí porque quiero estarlo. Quiero ayudarte.
Yoongi sonrió, sintiendo una oleada de calidez en su corazón. Se acercó a Jimin y, sin pensarlo demasiado, se acurrucó a su lado, buscando consuelo y seguridad en los brazos del alfa. Jimin lo abrazó con suavidad, sintiendo cómo su propio corazón se aceleraba.
— Sabes, esto es un poco complicado. —murmuró Yoongi, sintiendo el calor de Jimin a su alrededor.
— Lo sé. —respondió Jimin—. Pero lo superaremos juntos.
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30 días en celo ; Jimsu
Fanfiction❝En dónde Min Yoongi es un Omega único y con mucho Swag, cuyo celo dura casi todo un mes, increíble, ¿No?.❞