「Yes, daddy please」 ;+j. jk

❝🌹†Daddy†#13🌹❞

— Veo que no te han llevado preso. — Yoongi sonrió de medio lado al observar la silueta de Hana atravesar la puerta junto con Jeon.

— Yo también te eché de menos. — cotorreo Hana con burla. — De acuerdo, ¿Alguien me quiere explicar que está sucediendo? — Hana se sentía feliz, Jungkook había ido por ella y ahora se encontraba tranquilamente en su casa dispuesta a saldar algunas deudas pendientes, pero la extraña situación en la que se veía envuelta le daba un pequeño indicio de que algo más estaba ocurriendo.

— Hana...— Jungkook tomó su codo invitándola a tomar asiento en los muebles de la sala, ya no ocupaba su casco por lo que se podía detallar claramente como sus ojos brillosos titilaban entre su rostro blancuzco. Yoongi los siguió siendo consciente de que su participación era importante.

— ¿Sabías que no eres hija de Jungkook? — soltó este a tan siquiera rozar el sofá, Jungkook sintió palidecer ante tan poca sutileza, sus ojos se enterraron entre las entrañas de Min al ver la mirada estupefacta de Hana. Por un momento pensó en tomarlo del cuello y guindarlo sobre una estaca. La idea no le parecía tan mala.

— Espera, ¿Qué? — Hana miró a Yoongi para luego observar a Jeon, llevó sus ojos hasta sus manos sobre su regazo tratando de ordenar sus pensamientos, necesitaba que alguien le explicara.

— Yoongi me lo ha dicho hace unas horas. — Jeon trató de llamar la atención de la menor, dispuesto a apaciguar la terrible bomba que sin importarle mucho Min soltó. — Por eso he ido a buscarte... cuando me lo contó sentí que lo mejor era que tú también lo supieras.

— Entonces, ¿Por eso me besaste? — Yoongi miró a Jeon con cierta curiosidad, entonces Jungkook está dispuesto a todo, ¿eh? Pensó. — No lo sabía...— frunció el ceño, aunque pareciera descabellado, podría tener sentido, después de todo ella y Jeon no se parecían en absolutamente nada. Miró al pelinegro con cierta lastima momentánea. — ¿Mi mamá te fue infiel?

Jungkook apretó los puños y asintió pausadamente.

Una pequeña sonrisa retorcida escaló por el rostro de Hana provocando las miradas de ambos hombres confundidos. Si Jungkook no era su padre, significaba que no poseían ningún lazo sanguíneo, podía tenerlo para ella y él lo permitiría pues era evidente que si la había buscado era porque así lo quería. El golpe para Hana no fue tan impactante, pues jamás había visto a Jungkook como su padre y al final del día habría sido un grave problema si resultase ser que no era hija de su madre, miró a Jeon de reojo, él sí que debe de estar en la mierda, pensó.

Joder, esto parece un puto drama juvenil.

Hana se levantó de un salto, fue hasta la cocina dispuesta a buscar la botella intacta que aún reposaba sobre la encimera, extrajo tres pequeños vasos de los gabinetes y obteniendo la mirada chispeante de Jungkook se sentó en el sofá. — No sé ustedes pero yo necesito un poco de esto. — Así como la noticia había llegado, se había ido, al menos para ella, puesto que Jeon aún sentía esa pequeña espina en su pecho.

Jungkook le miró con intriga, ¿Cómo demonios podía estar tan tranquila, acaso no le molestaba en lo más mínimo la descabellada noticia? Miró a Min de reojo tratando de descifrar su expresión, al parecer él también se sentía intrigado. Podía entender perfectamente que su hija no lo haya visto como una piedra en el camino, ahora con la opción ambos podían llegar a considerar la idea de estar juntos.

— ¿Seguro que estás bien?

— Por supuesto que estoy bien. —puntualizó llenando las pequeñas copas con esmero. — Después de todo no fue a mí a quien le pusieron los cuernos. —completó. Yoongi sonrió con petulancia, Hana era tan tosca y poco convencional que solo a ella se le podría ocurrir un comentario así.